Estas son las canciones que ya nadie soporta del rock en español

Todos tenemos ese amigo forever que, convencido de que va a ser el próximo rockstar, con una voz de rata apachurrada se echa todo su repertorio de "clásicos del rock en español" con esa guitarra acústica que le regalaron en la navidad del 2000. Y aunque a veces su esfuerzo resulta lindo, y la mayoría de la gente canta con él, la verdad es que todos odiamos escuchar esas malditas canciones.

Hablamos de esos temas que vienen en cualquier disco recopilatorio quemado o memoria mp3 vendida en el Metro Tacubaya con títulos como "Los grandes éxitos del rock en nuestro idioma" o "Los 50 clásicos del rock en español". Todos los hemos cantado, tartamudeado, silbado, escuchado en mil versiones distintas y, aunque les tengamos un cariño especial porque crecimos con ellas y se las saben hasta nuestras abuelas, están tan quemadas que hoy en día es difícil escucharlas sin tener unas ganas incontrolables de quemar el aparato que las está repdroduciendo.

Este es un recorrido por algunos de esos clásicos que nos tienen hasta la madre.

Esta es la primera canción que se aprenden los que estudian guitarra. El clásico que se ha cantado en cuanta reunión social se haya inventado y un fijo en todos los karaokes y rockolas que hay desde México hasta Argentina. El clásico de los clásicos del rock en español cantada por la banda más grande en la historia del continente y una canción que ni por el putas quisiéramos tener en nuestra lista de reproducción.

Hasta el mismo FIto Páez ya debe estar hasta la madre de esta canción. Ese punteo de guitarra que se escucha en casi todos sus tres minutos y medio, esa letra melosa y frases como "la melancolía de vivir en el mundo sin una estúpida razón" la han hecho una canción desesperante y quemada hasta no poder más.

En todos los proms del mundo hispanoparlante esta canción ha aparecido para recordarnos que siempre podemos ser más cursis. De verdad, al escucharla dan ganas de sacar un encendedor y moverlo de lado a lado mientras un rayo de luz acaricia suavemente nuestra cara recordándonos los buenos momentos de la vida.

Estos españoles no tuvieron muchos éxitos y "En algún lugar" fue la canción que les pegó en absolutamente todos lados. Seguro ustedes también se la saben en guitarra y cantan: "En algún lugar de un gran país olvidaron construir un hogar donde no queme el sol" a grito herido. No se hagan.

¿Se acuerdan de esa canción con la que hacían pasitos de ska y se creían muy rebeldes? Es esta. No voy a negar que en algún momento a mí también me pegó, pero hay que aceptar que está de oso que te guste Maná.

¿Cuantas veces maldita sea? Hoy en día escuchar "La chispa adecuada" me da un inevitable tic en el ojo derecho. Me da ñañaras pensar en Bunbury haciendo una vocecita sobreactuada sobre un fondo rojo con naranja. Ya es hora de que superar esta cosa.

La historia de la flaca que le clava los puñales en la espalda a Calamaro se ha repetido demasiadas veces ya. Es decir, a mitades de los noventa y con un corazón roto este era el tema que había que escuchar, pero es 2016, hay que darle un descansito.

Respeto eterno para Los Fabulosos. Es imposible escucharlos y no sentir nostalgia por todas las borracheras y parrandas que nos hemos metido con sus canciones. "Matador" es un tema que le enciende a uno la sangre y Vicentico con el pelo rojo es un clásico, pero ha sonado tantísimas veces que ya perdió casi toda la gracia.

La ingrata es cualquier chica que nos haya dejado y que recordamos en una peda de proporciones épicas. En el video podemos ver como Rubén fue otro que se dejó contagiar por esa moda noventera de pintarse las mechas de rojo y, aunque este track está demasiado quemado, a todos nos da siempre un poquito de consuelo.

Pfff, Maná. Así parezca imposible hubo una época en la que los amábamos y antes de hacer un remix rompe cráneos de esta canción con Nicky Jam, la gente se enfiestaba con "De pies a cabeza". Tal vez fue esa mezcla entre un bajo juguetón y ese aire tropicalongo que la convirtió en un clásico del rock en español al que igual, no quisiera volver a acercarme nunca en la vida.

"¡Porque yo no quiero trabajar, no quiero ir a estudiar, no me quiero casar, quiero tocar la guitarra todo el día y que la gente se enamore de mi voz!" Que rebeldes fuimos alguna vez…

Otra canción de despecho noventero que hoy sigue siendo coreada por cualquier desgraciado en cuanto karaoke exista. "Lamento boliviano" supera lo que conocemos como una canción quemada y es más como un carbón que está ahí, esperando a que alguien más lo use por enésima vez.

Obviamente Soda no iba a tener solamente una canción en esta lista. Su "Persiana americana" también ha sonado hasta en bautizos sin que nadie dijera nada.

"No dejes queeeeeeeeeeeeeee". Más de uno se debió haber jodido las cuerdas vocales tratando de imitarle la voz a Saúl.

Sui Generis es de los papás de lo que hoy conocemos como rock en español. Nito Mestre y un joven Charly García eran un par de mechudos medio hippies que con guitarra, piano y voces súper melodiosas, le dieron forma a este movimiento desde el sur del continente. Unas leyendas que obvio, tienen su cancioncita que no puede estar más quemada.

Lo único que vamos a decir es: Qué horror ser flaca y que te dediquen esta canción.

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¿Algún clásico del rock en español ultra quemado que se nos haya pasado? Déjenlo en un comentario en nuestra página de Facebbok.