Francisca Valenzuela - el pop más violeta y elegante

Llegué a la entrevista con Francisca antes de que empezara a llover. Nos sentamos en un sillón dos plazas bastante pequeño y, justo cuando comenzamos hablar sobre los colores que envuelven su música, los truenos empezaron anunciar la tormenta. Para esta cantante chilena el dorado y el azul marino son tonalidades intensas que se identifican con su pop pastoso. Ella cree que el equilibrio de lo que hace está apartado de los extremos. Nada tan blanco o tan negro. Le gusta más el violeta.

Unos minutos antes de empezar con lo que iba a ser mi bombardeo de preguntas, platiqué con Francisca sobre pastillas y sus efectos. Ella cree que si existiera una píldora que te obligara a decir toda la verdad pero que al mismo tiempo te híperconcentrara y te permitiera tener espasmos de introspección, sus canciones serían el mejor acompañante para darse el viaje.

Vi tu video de “Esta Soy Yo”. Te gustan los disfraces…

Sí, creo que fue justo ese video fue mi incursión a la actuación. Siempre me ha gustado el tema estrambótico y visual. No sé si volvería a hacerlo (hablando de esa idea de ponerme tantos disfraces) pero para esa canción funcionaba.

¿Te disfrazas en Halloween?

No, pero era muy gótica. Usaba collares Victorianos e iba a eventos en cementerios. Ahora lo recuerdo y me da pena.

¿Cuál es el disfraz más ridículo que has usado en tu vida?

Cuando empecé a tocar usaba muchas cosas de cuero, como unas faldas de latex, con pañuelos y moños en la cabeza. Como una Minnie Mouse pero en versión horrible.

¿Qué crees que es lo más difícil de hacer música?

Yo creo que hay dos cosas: una es hacer música de manera intuitiva y otra, muy diferente, es hacer música profesionalmente. Sobre todo cuando se quiere mantener el trabajo lúdico. Aprender cómo crear cierto tipo de música y al mismo tiempo no cerrarse a todo un abanico de opciones es lo más complicado. No hacer solamente lo que uno puede, si no lo que quiere.

¿Hay alguna canción tuya que ya estés cansada de tocar?

Obvio, siempre pasa. “Dulce” la he tocado tantas veces que ya hay algo rítmicamente que me aburre. La toco mucho menos pero no por el hecho de que esté cansada de hacerlo si no porque se ha ampliado mucho más el repertorio.

¿Cuál crees qué es la diferencia entre la escena musical independiente en Chile y México?

Yo creo que en general la escena es independiente en Chile por defecto. Allá no hay multinacionales. No hay otra opción, si quieres hacer música tienes que hacerlo por tu cuenta y eso genera la proactividad dentro del país.

¿A qué edad decidiste dedicarte a la música?

Como a los 18 años, aunque la idea siempre estuvo en mi cabeza. Nunca dejé de mandar mis canciones a concursos y festivales.

¿Ganaste alguno?

Nunca. Siempre ganaban puros hombres y la única vez que quedé en segundo lugar nunca me dieron mi premio porque los organizadores huyeron. El premio era un día de grabación en un estudio y jamás lo cumplieron.

¿Crees que un poco más difícil sobresalir en el medio por ser mujer?

Para muchas mujeres lo ha sido, para mí no. Ahora, sí creo que pasan cosas con las personas que administran las oportunidades, su forma de pensar es: si ya tenemos a una mujer para qué queremos a otra. Yo recuerdo que en las pláticas con los sellos (con los que no firme por esas razones) siempre estaban tratando de compararme con otras artistas mucho más famosas, querían un poco que me pareciera a ellas, o que todas nos pareciéramos.

¿Qué opinas sobre el atentado en Chile?

Estaba escuchando en las noticias que acaban de detener a 3 posibles sospechosos. Es rarísimo, si bien yo he estado viajando mucho, sí he notado que hay un grado de hostilidad y de insatisfacción social muy fuerte. La falta de credibilidad de las instituciones y el gobierno se siente. Chile era demasiado estable y tranquilo, este tema de los atentados es no sólo raro, si no un poco alarmante.

¿Qué es lo más raro que te ha regalado un fan?

Una vez unos chavos de un club de fans me regalaron unos calzones bordados que decían “Franáticos” (así se llama el club de fans) junto con una bolsita de chocolates en forma de penes. Nunca los pude usar porque era demasiado pequeños para mi, me estrangulaban, pero me gusta que piensen que soy más delgada de lo que realmente soy. En general guardo todos los regalos, tengo un espacio especial para todos ellos.

¿Cuál crees qué es la diferencia más marcada entre los latinos y los gringos?

El sentido del humor y nivel de fiesta. El latino es súper cool para la fiesta, todas las noches tiene una posible buena salida. El gringo en cambio, se prepara, lo planea, pasa como todo el día pensando en eso. Y en cuestión cultural creo que la diferencia sería que el gringo tiene un deber ser muy estructurado, se fijan mucho en las edades y en lo que se debe hacer en cada etapa de la vida. La gente latina es mucho más abierta, mucho más espontánea.

¿Hay algo qué estés cansada de contestar en las entrevistas?

Me da mucha lata que me pregunten todo de cero. Me pasa muchas veces, llego a la entrevista y me dicen “Cuéntame: ¿tú quién eres?” Y es muy aburrido porque sin contexto la cosa se vuelve plana.

¿Hay algo que te hubiera gustado que te preguntaran en una entrevista y nunca lo han hecho?

Nunca me han preguntado sobre mi proceso creativo o de desarrollo y es algo de lo que siempre platico con gente que se dedica hacer arte porque me interesa bastante. En mi proceso, por ejemplo, siempre tengo el piano, el computador con los controladores, la guitarra y un escritorio. Generalmente compongo y escribo simultáneamente.

Francisca va a presentarse este jueves 25 de septiembre en el Lunario. Y aquí les dejamos un poco de su música para que les entren ganas.

Vamos a regalar dos pases sencillos para su concierto el 25 de septiembre que además tienen meat and greet.

Para ganar todo en esta vida:

1. Sucríbete a nuestro Newsletter aquí.

2. Da follow a @noiseymx en Twitter.

3. En un tuit dirigido a @noiseymx dinos qué es lo más raro que le han regalado sus fans a Francisca.