Esto es lo que la industria cárnica no quiere que veas

Interminables praderas verdes, corrales impolutos y blancos corderitos correteando por el campo. Eso es lo que la industria cárnica quiere que sepas sobre las chuletas de cordero que te comiste ayer o que estás pensando comerte cualquier día de estos.

Pero por desgracia, toda esa comedia idílica no existe. La vida de un cordero es algo bastante más terrible que todo eso. Es mucho más aburrida y sobre todo mucho más trágica y sin sentido. Los corderos son separados de su madre poco tiempo después de nacer, a algunos se los cargan incluso mientras todavía son lactantes (¿de dónde pensáis que viene lo de "lechal"?). Los otros tampoco durarán mucho. Pronto entrarán en el engranaje de la industria en el que enseguida acabarán degollados y colgando de un gancho. Después alguien se los comerá.

Igualdad Animal ha querido este año retomar su campaña "Salva a un cordero" publicando un vídeo en el que se muestra en solo 60 segundos la triste vida de un cordero. Crudo y directo, el vídeo no hace más que enseñar una realidad que se repite todos los días miles de veces. En España mueren cada año en los mataderos 19,3 millones de corderos. Siendo 64,5 millones los que mueren a nivel europeo.

"Creemos que un vídeo de estas características, que condensa la triste vida de un cordero en 60 segundos, va a tener un gran impacto en las redes sociales, y muestra la terrible realidad que viven estos animales diariamente. Para la industria cárnica los animales son simple mercancía de la que obtener el máximo beneficio económico, nosotros creemos que la ciudadanía tiene derecho a saber cómo son tratados los animales", afirmó Javier Moreno, cofundador de Igualdad Animal.

La organización animalista hace pública esta campaña justo antes de la Pascua, momento en el que el consumo de carne de cordero aumenta mucho en algunos países especialmente en Italia. En anteriores ediciones, tras la movilización, se consiguió que el consumo de esta carne se redujera en un 40% en ese país.

Échale un vistazo al vídeo y piensa si realmente te compensa seguir comiendo carne o no.