Bahidorá: Un paraíso ecléctico y subsónico de música contemporánea

La fecha que marca el final de un duro invierno se acerca, febrero es un mes poco usual para realizar un festival en la periferia de la ciudad de México, pero sabemos que esto nunca ha sido un impedimento para que la música y las propuestas musicales paren. El festival Bahidorá acaba de anunciar su fresco cartel, y como era de esperarse es una gran oportunidad para despejarse de todo y nadar entre todas las propuestas artísticas que convergen una vez al año en las estacas.

Este año el festival en definitiva tiró la casa por la ventana, el line up es extenso y ecléctico, pero sobre todo es de muy buen gusto. Muchas veces los amantes de la música nos preguntamos qué es lo que hace diferente a un festival de otro, al final es difícil vislumbrar entre tantas propuestas, cómo es que siguen un hilo conductor. Pues bien este no es el caso, si algo llama la atención de Bahidorá este año es claramente la diversidad que denota.

Desde grandes figuras del pop rock internacional como Ariel Pink, después de un esperado regreso a México y con un gran disco nuevo bajo el brazo, hasta la nueva ola de gestión y distribución de música africana, representada por Awesome Tapes From Africa. Bahidorá no escatimó en propuesta, y al igual trae actos que nunca han venido a nuestro país. Kamasi Washington, por ejemplo, pieza clave de la escena Jazz de L.A., hasta artistas como Shigeto, una de las piezas más fuertes de Ghostly International, cuyo acto va más allá de un simple acto electrónico en vivo.

En terrenos un poco más bailables, y hablando de un gran ensamble que es bien querido de nuestro país, Mount Kimbie es una de las más gratas sorpresas que pudo dar la revelación del cartel. Artistas menos conocidos pero igual de talentos como RAMZi, Gilles Peterson y Nathy Peluso, dan por sentado que este es un gran año para el festival, no sólo en el sentido musical, sino el tipo de público que puede tomar una nueva perspectiva de este trabajo curatorial.

Para ensanchar y hacer brillar la pista de baile, también existen propuestas sólidas y bien recibidas por su gran propuesta y su poco acompañamiento de farándula. Axel Boman, Telephones, Romare y Valesuchi, demuestran que el festival trata de entender y atender a todo su público meta, sin dejar de llenar espacios con propuestas nuevas y posicionadas. Propuestas que oscilan entre los popular y un nicho mucho más sensible a la experimentación musical.

Sin duda, no puedes dejar de poner atención al cartel y buscar propuestas que te hagan decidir vivir esta magna experiencia, como siempre, hay de todo y para todos. Si crees que está elevado el precio y que no vale la pena llegar tan lejos, deberías analizar la música que se presenta en esta edición, pocas veces el cartel sobrepasa el gremio popular (sin hacerlo a un lado) y pone sobre la mesa a grandes expositores, que independientemente del género, son grandes y radicales figuras de la música contemporánea en el mundo.

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