Andreas Kisser habla de migrantes, tecnología y Sepultura en la época moderna
Foto: Marcos Hermes

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Música

Andreas Kisser habla de migrantes, tecnología y Sepultura en la época moderna

Una nutrida charla con una de las grandes leyendas del metal a propósito de 'Machine Messiah'.

En lo que se refiere a fans de la música, muy pocos se le acercan a los metaleros en términos de lealtad. Pocos siguen por tanto tiempo y con tanta reverencia a sus grupos favoritos como esta tribu. Cuando se trata del lanzamiento de un disco o una presentación en vivo, puedes contar con que la mayoría estarán ahí desde horas tempranas para escuchar antes que nadie, comprar los primeros boletos o acceder al recinto. Dicho esto, este mismo fervor es un arma de doble filo, ya que de igual manera la fidelidad se puede poner a prueba y tomarse bandos casi de forma permanente si es que hay una ruptura o rivalidad.

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Uno de los casos en la que se ha dado este tipo de respuesta ha sido con una de las bandas más queridas del metal internacional en la historia de género. En 1996, Max Cavalera dejó Sepultura, la banda de la cual estuvo al frente desde 1985 al tomar el mando de la voz; este suceso fue casi extraordinario porque la voz y guitarra rítmica de Max eran tan esenciales para el sonido de la banda de Belo Horizonte como lo eran las baterías tribales y frenéticas de su hermano Igor, los solos clásicos y veloces del guitarrista Andreas Kisser y el groove del bajo de Paulo Jr. Que Max dejara Sepultura para muchos significó que la banda jamás volvería a ser igual o valdría la pena.

Desde el primer lanzamiento que hicieron fuera de Brasil (tras dos discos y un EP), el mítico Beneath The Remains de 1988, Sepultura se convirtieron en uno de los grupos más celebrados del metal extremo en todo el mundo. Este álbum y el subsecuente Arise alzaron la barra muy alto en lo que se refería a thrash metal, con fans y críticos comparando estos trabajos con los más inspirados de Slayer, a la vez que se consideraban como un puente al naciente movimiento del death metal. Para 1993, la banda bajó la velocidad e implementó austeridad a su ataque al igual que habían hecho Metallica con el disco negro, (así como Pantera y Helmet), para lanzar Chaos A.D. uno de los mejores discos de los noventa. Para 1996, la banda lanzó Roots, cuyo material promocional anunciaba que era un disco que iba "del tribalismo a la tecnología" gracias a colaboraciones con la tribu Xavante del Amazonas, invitados como Carlinhos Brown, Mike Patton y Jonathan Davis de Korn, además de experimentación con sonidos entonces nuevos como el nu metal, dando como resultado su canción mejor conocida, "Roots Bloody Roots". Estaban en su mera cumbre.

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En 1997 Max formó Soulfly, continuando con lo que la banda había iniciado en Roots y ganándose a muchos jóvenes fans al contar con colaboraciones de Fred Durst de Limp Bizkit y Chino Moreno de Deftones. El siguiente año, Sepultura regresó a las andadas con un nuevo vocalista, Derrick Green de Estados Unidos; el álbum que los vio volver, Against, tuvo pocas ventas comparado con los álbumes que le precedían. Poco a poco, Sepultura pasaron a un segundo plano para muchos fans; para ellos, la banda pasó a ser irrelevante, algo remarcado aún más por la salida de Igor Cavalera en 2007 tras la salida del disco Dante XXI.

Sin embargo, Sepultura se ha convertido en una de las bandas más trabajadoras en las últimas tres décadas del metal. Han sido constantes con sus discos así como girado por todo el mundo, literalmente tocando en territorios que pocos consideran en sus agendas, como Emiratos Árabes, Turquía, Armenia, India y otros lugares. Han colaborado con gente que va desde el ex baterista de Slayer, Dave Lombardo, hasta el ícono de la música popular brasileña Zé Ramalho y el ensamble de percusionistas francés Les Tambours Du Bronx. Si existiera una foto en el diccionario bajo la definición de "bandas de culto", vendría una foto actual de Sepultura.

2016 los vio lanzando lo que probablemente es su mejor disco desde su época clásica. Una revisión casual a la opinión de Sepultura de la época de Derrick Green indica que cada uno de sus discos se considera como el regreso a la época clásica o "tan bueno como lo que hacían antes". Sin temor a exagerar, Machine Messiah es un disco tan genial como Beneath The Remains o Chaos A.D., explorando caminos sonoros diferentes. Green maneja un sentir melódico poco escuchado mientras proyecta poder cada que es necesario, mientras que la banda crea mundos sonoros difíciles de categorizar inclusive dentro de su mismo catálogo. El tema que le da título al disco es lento y épico, con gran oscuridad con pequeños rayos de sol que se asoman por toda la canción; otras canciones como "I Am The Enemy" son tan frenéticas y pesadas como cualquiera de su temprana carrera, mientras que otros momentos dan un híbrido entre groove y poliritmos muy impresionantes. Para todos aquellos que son Team Cavalera, Machine Messiah es una buena excusa para darles una nueva oportunidad.

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Platicamos con Andreas Kisser sobre este disco y su temática actual, la tecnología y el sentimiento global ante los migrantes y el papel de la música ante todo.

Noisey: ¿Cómo va todo, Andreas?
Andreas Kisser: Todo excelente, la respuesta de la gente con el disco ha sido muy positiva. Hemos estado de gira con Kreator, Soilwork y Aborted por dos semanas y hemos estado tocando muchos temas nuevos en la gira. Estamos muy contentos con los resultados. El sonido, la portada, el arte y la respuesta de los fanáticos que ya han escuchado el disco.

Les interesa seguir adelante siempre.
Sin duda. Claro que hay espacio para tocar los temas viejos, pero lo más importante es tocar los temas nuevos. El disco está muy fuerte.

Escuchándolo lo que más me resaltó del disco es el sonido. Tiene muchas cosas que suceden en las canciones, todas tienen un punto en el que se basan, aunque algunas son largas pero tienen poder y un solo eje. Retiene lo que ha caracterizado a Sepultura. Es un disco muy fuerte y me gustaría saber su inspiración.
Hicimos una gira de tres año con el lanzamiento de The Mediator Between The Head and Hands Must Be The Heart, al final del 2013 y tuvimos también la celebración de 30 años y el sencillo "Under My Skin", un homenaje a todos los fans que tienen tatuado a Sepultura y giramos por todos lados, tocamos primera vez en Armenia, Georgia y muchas ciudades en Rusia. La gira de 30 años de Sepultura nos dio un sentimiento de cerrar un ciclo, una etapa de la historia que comenzó en 1984 y ahora con Machine Messiah es como un nuevo inicio a una nueva fase en la historia de Sepultura. En este disco estamos buscando cosas nuevas con productores diferentes. Ross Robinson es un gran productor y un muy buen amigo nuestro, hicimos un gran trabajo juntos en The Mediator pero ahora buscamos un productor completamente diferente, con influencias diferentes y cabeza diferente y puntos de vista distintos en cuanto a la música de Sepultura. Queríamos hacer un disco como este, trabajar más la música, quebrar nuestros límites como músicos. Eloy [Casagrande, baterista] nos ha traído muchas nuevas posibilidades para la música. Fue un trabajo en conjunto hecho en Brasil muy detallado. Queremos hacer un disco que cada uno de los temas tuviera una característica fuerte y distinta de las otras. "Machine Messiah" es un tema muy diferente de "I Am The Enemy" o "Phantom Self". El formato de vinilo ayudó mucho a componer este disco, también; porque por ejemplo, el tema "Sworn Oath" fue escrito justamente para abrir el lado B. Nos ayudó a componer esta historia, es un disco que puedes escuchar de principio a fin y la idea fue esa. También la portada, muy colorida con un artista diferente de Filipinas que también nos ayudó a hacer la música, influenciar a hacer la música. Todos estos factores fueron muy positivos para nosotros para hacer un disco como este.

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La portada se me hace como un lado opuesto a la de Arise. Es un concepto parecido pero Arise es muy oscura y Machine Messiah es colorida.
Yo no sé si fue algo consciente, le tengo que preguntar a Camille [Dela Rosa] si hay una conexión con el arte de Michael Whelan que creó el arte de Arise, también de Beneath The Remains y Roots y todo. Si tienen conexión o no, no importa; es una portada muy intensa, interesante y nos conecta mucho con el tema del disco, con la robotización de la sociedad, lo que vemos hoy en el mundo, en la sociedad. Los smartphones, las computadoras, la tecnología que está siendo parte de nuestro día a día. La portada fue algo hecha en 2010 no está conectada con el disco pero quedó perfecta por la temática.

Machine Messiah habla de cómo estamos conectados hoy en día con la tecnología ¿Cómo definirías lo que pasa en sus letras?
Hablamos de lo que miramos hoy, no es ciencia ficción futurista o del futuro lejano. Tenemos el privilegio de conocer países muy avanzados en los temas tecnológicos y visitar otros más tradicionales sin mucha tecnología. Estamos tratando de buscar un punto de equilibrio, porque parece que los robots no están ayudando al desarrollo del cerebro o del intelecto; por el contrario, están haciendo todo por nosotros y nos volvemos más parecidos y más idiotas. Entonces creo que estamos buscando un equilibrio, porque los robots están ahí, son una realidad, pero necesitamos mantener nuestra condición humana. No sólo recibir una idea y estar de acuerdo. Hablamos de religión de política, de problemas climáticos del planeta, refugiados y en todo está la temática robótica. Las cámaras, aplicaciones para comida, mujeres, GPS. Hablamos no poner todo nuestras aspiraciones en los robots y desarrollarnos más como seres humanos y tener una conexión más directa con la naturaleza. Hay muchas frecuencias y energías que no podemos explicar de una manera muy clara y creo que tenemos posibilidades nuevas de conectarnos con la naturaleza un poco más directamente.

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Mencionaste que la temática de la robótica tiene que ver con aspectos de política y refugiados, cosas que han sido muy tensas en últimos tiempos.
Sin duda. Creo que la misión del arte, ya sea música pintura poesía, teatro, etc. Tiene la misión de proponer nuevas posibilidades para la sociedad y para el hombre. Imagínate un mundo actual sin Pablo Picasso o sin Stravinsky o sin The Beatles, artistas que cambiaron las cabezas de la gente con nuevas posibilidades y nuevas maneras de mirar las sociendad de nosotros. ES importante por que creo que no todas son reglas políticas y religiosas, creo que el arte rompe las barreras, los muros. Tenemos la conciencia y la responsabilidad de hablar de las cosas con mucha honestidad y poner nuestro punto de vista a travé sde la música y de las letras. Viajar en el mundo y escuchar a la gente, escuchar otras ideas y así hacer un planeta mejor para todos.

El problema con los robots también es un problema de internet que hay mucha mentira. Casi la mitad de lo que leemos en internet es mentira. Hay que tener mucha preocupación y mucho cuidado para buscar la información y tener cosas que son verdaderas para construir algo bien. Ahí está el punto de buscar un equilibrio con nuestra propia inteligencia y hacerla funcionar.

Hay muchas mentiras de lo que hay en internet, es un arma de doble filo. Ustedes tienen una sensibilidad diferente al conocer los conflictos sociales que se ven tanto en el mundo. Lo digo porque son una banda que ha tocado en rincones que muchas otras no han tocado, pero también siendo una banda de Brasil. Es una sensibilidad que tal vez no tendrían si fueran una banda de EUA o Europa. ¿Cómo ven este quiebre entre tecnología y humanismo?
El internet tenía la idea de unir a las personas pero estamos viviendo en tiempos de mucha intolerancia. Si piensas A no puedes pensar Z [ríe], las ideas son muy polarizadas. Creo que tenemos que buscar soluciones, ayudar a la gente. Brasil es un país construido por inmigrantes: japoneses, italianos, sirios, libios, libaneses y como tenemos tantas mezclas de culturas, música y gastronomía, es un país increíble por esa mezcla de gente y de ideas. Y están creando muchas fobias y es una cancha difícil de jugar. La gente no está abriendo los oídos para escuchar, ellos solo quieren escuchar lo que quieren. Los fans y la gente que escucha música tienen una cabeza un poco más abierta, escuchan estilos diferentes de música. Cuando van a un festival pueden escuchar de Coldplay a Metallica e intentar conocer diferentes maneras de vivir y respetarlas, que es lo más importante.

(Foto principal: Marcos Hermes, vía).