Adán Jodorowsky: “Recuperé mi nombre y no quiero escapar de lo que soy”

Nacido hace 38 años en París, Adán es hijo del mítico director de cine, poeta, escritor, guionista de cómics y tarotista chileno Alejandro Jodorowsky y este año, después de un silencio discográfico de cuatro años, presentó su cuarto disco como solista titulado Esencia Solar, el primero que firma bajó su verdadero nombre y con el que enfrenta la más difícil de sus transformaciones: convertirse en él mismo. Durante estos años, la vida de Adán cambió por completo. Además de empezar a presentarse con su verdadera identidad, en el plano personal formó una familia; un hecho que transformó sus visiones de la vida y que se refleja en las canciones de su más reciente álbum, una producción humana, espiritual y luminosa, que muestra su lado más íntimo y en el que sus raíces latinoamericanas afloran como nunca antes.

Recientemente le pegamos una llamada a Adán para conversar sobre Esencia Solar y sobre esta nueva etapa de su vida en la que parece haber descubierto su propia identidad como persona y como artista. Conversar con él es sumamente agradable; su hablar es suave y pausado con un acento mexicano con entonación francesa, la risa se le da fácilmente, y sus respuestas son lúcidas e inteligentes.

NOISEY: Han pasado casi tres años desde que decidiste matar a Adanowsky. ¿Cómo sientes que ha cambiado tu carrera desde entonces?
Adán Jodorowsky: Es muy raro porque antes, creando personajes teniendo el nombre de Adanowsky, creía que iba a devorarme el mundo pero estaba siempre limitado a un cierto público, me era dificilísimo llenar las salas. Luego cambié mi nombre a Adán Jodorowsky, mi verdadero nombre, y ¡pum! se abrieron todas las puertas. Ando haciendo giras en los Estados Unidos, están llenas las salas, ¡es una locura! Entonces me di cuenta que no hay nada mejor que ser uno mismo.

Cuando mataste a Adanowsky dijiste que estabas cansado de mostrarte como alguien que no eras y de tener máscaras; sin embargo, muchas canciones de esa época como “Me siento solo”, “Estoy Mal” o “Amor sin fin” parecieran mostrar la realidad de Adán más allá de los personajes. ¿Crees que al presentarte con tu verdadero nombre estás siendo más sincero contigo mismo?
Yo creo que sí, totalmente. Lo que pasa es que antes habían partes sinceras que salían de mí como un verdadero Adán pero escondido detrás de un personaje; o sea, no lo asumía completamente y esas canciones en realidad son una sátira. Yo nunca me sentí solo, yo no tengo esa filosofía de vida de estar mal, va en contra de mi ética. Era más bien un juego, como que la gente se siente así entonces voy a escribir una canción como si yo me sintiera así también y ahora mi nuevo disco Esencia Solar, son puros temas que son cien por ciento sinceros y que realmente siento. Esa es la diferencia.

De hecho, casi todas las canciones son en primera persona.
Sí, bueno, hay una canción que se llama "El Cantor", que habla de un hombre que trabaja en una oficina y que sueña con ser artista y cantar pero la sociedad le impide ser lo que él quisiera, entonces eso es más bien sobre cosas que vive el mundo; al igual que yo veo que la gente tiene miedo de envejecer, entonces hice una canción que se llama "Qué bello es envejecer", que trata sobre lo bello que es envejecer ya que la gente habla sobre la vejez como algo horrible. Intenté encontrar temas originales porque siempre que escuchas los discos, sobre todo son temas de amor y desamor; entonces me dije: “Tenemos que tocar otros temas también”.

Cuando escuché Esencia Solar la sensación que me quedó es es que es un disco hecho por un hombre enamorado.
¡Ja Ja Ja! Sí, yo cuando compuse ese disco mi mujer estaba embarazada y yo estaba en una especie de euforia o de trance mientras la acompañaba durante mucho tiempo en la casa. Escribí muchas canciones muy rápido. Escribí 30 canciones de las que me guardé 14.

¿Cuánto tardaste en hacer Esencia Solar?
Tardé ocho meses en componerlo. Yo siempre compongo grabando en mi teléfono y luego lo pongo de lado, voy acumulando y después de un tiempo cuando tengo muchas canciones las escucho, las selecciono y después escribo las letras. Luego me llevó cinco meses hacer el disco porque hice pausas; si no, me hubiese tardado un mes y medio.

¿Por qué se llama Esencia Solar?
Porque era la parte más luminosa de mí lo que puse en el disco. Es mi esencia solar, lo que brilla dentro de mí. También porque la esencia para mí no tiene oscuridad. Lo que pasa es que la sociedad te ensucia, un niño nace puro. Yo cuando estaba muy mal fui a ver a una curandera y me hizo una curación y renací; de repente me desperté y me acordé de la pureza que yo tenía cuando era niño y que yo era eso. Entonces de ahí viene Esencia Solar.

Cuéntame como surgen las colaboraciones con Natalia Lafourcade y León Larregui.
Yo no había hecho colaboraciones en mis discos acá en México y sentí que era el momento de hacerlo. A Natalia yo la conozco desde antes de sus éxitos enormes; ahora es una estrella enorme con su tour bus con su cara enorme en él y que llena salas por todo el mundo. Su tío Enrique Lafourcade, un gran intelectual, era amigo de mi padre en los años cincuenta y nos conocemos por ahí; luego ella era mi vecina y después me pidió que cantará en su disco de Agustín Lara. Desde entonces, yo tenía en mente que tenía que colaborar con ella en un disco mío. Compuse "Vivir con valor", pensé en ella y como el disco tiene algo que ver con lo que ella está haciendo ahora con ritmos latinos y clásicos, se lo propuse y aceptó.

Con León vivíamos literalmente en frente, yo abría la puerta de mi casa cuando vivía en los edificios Condesa y la puerta de enfrente era la de su casa. Nosotros nos conocimos en un antro la primera vez y nos caímos muy mal por una historia de chicas. Luego yo tenía el mismo tour manager que Zoé y él me obligó a estar con ellos en el mismo van; después de un concierto de ellos, comenzamos a hablar y después de un tiempo él vino a mi casa para preguntarme si yo sabía de algún productor para producir su primer disco solista Solstis, entonces le empecé a mostrar cosas que yo había hecho y él dijo “¿Pero quién hizo ese sonido?”, y yo le dije, “Pues yo”, y ahí me preguntó “¿No quieres producir mi disco?”, yo le dije que sí y él se vino a París sin conocer a nadie y grabamos el disco. Gracias a esos dos discos que le produje a León y que ahora son triple disco de platino, yo empecé mi carrera de productor y ahora la gente me busca.

Todos tus discos tienen un sonido muy diferente entre sí. En El Ídolo se siente mucho la influencia de la canción francesa. Amador es más cercano al folk californiano. Ada es más retro, muy disco y ochentoso. Y Esencia Solar, por su parte, tiene un sonido mucho más latino; de hecho, te escuché decir hace poco en una entrevista que ahora eres un cantante latino.
No es que sea latino, es que estoy viviendo en México y estoy metido en la escena latina. De repente empecé a cantar solo en español, pero eso no quiere decir que no voy a cantar más en inglés o en francés. De hecho, el próximo disco que quiero hacer es un disco de rock, entonces todo cambia mucho. Lo que pasa es que nunca había explorado los ritmos brasileños, cubanos, andinos, africanos y tenía muchas ganas desde hace mucho tiempo y lo hice. En este disco también es la primera vez que hago de ingeniero de sonido, hago los arreglos y la mezcla. Fue un disco que hice completo yo solo; también por falta de presupuesto, no tenía un presupuesto enorme, entonces tuve que arreglármelas porque mezclar una canción son 500 o 1000 dólares por canción y como no podía pagarle eso a alguien para que lo mezclara, lo hice yo mismo y así aprendí. Me pasé tres meses mezclando el disco cuando normalmente uno se tarda 15 días.

¿Cómo te ha influido musicalmente el hecho de estar viviendo en México?
Yo conocía la jarana pero era un instrumento que no conocía bien y es un instrumento que ahora me apasiona y lo encuentro increíble. Yo tengo un jaranero increíble en mi banda que se llama Sergio Medrano, que descubrí porque puse un anuncio en mi página de Facebook diciendo que buscaba músicos para mi disco y apareció él. Yo buscaba un contrabajista y él me dijo, “Yo toco requinto y jarana”, y yo le dije, “Pues bueno, ven al estudio a ver qué hacemos” y al final tocó en todas las canciones y lo guardé para mi gira, un tipazo. También me apasionaron mucho las percusiones y los ritmos peruanos y andinos. Además de eso, yo tengo un abuelo maya y mi madre es mexicana; mi padre, aunque sea de familia rusa nació en Chile, entonces es como que lo llevo en la sangre. Lo latino siempre estuvo en mí. Yo viví 30 años en Francia y tenía el latino dormido dentro de mí pero estaba muy presente; entonces me vine a vivir a México y de verdad prefiero vivir en los países latinos que en Francia. Argentina me está atrayendo mucho. Siempre digo que me voy a vivir allá pero nunca lo hago, es que tengo miedo porque está muy lejos de todo, pero de verdad me encanta, me siento muy cercano a Argentina y a su gente que es una mezcla de todo. Yo soy una mezcla de ucraniano, de alemán, de irlandés, de mexicano, de judío y en Argentina es también así, entonces cuando voy allá me siento en casa.

Sobre eso que estás diciendo de que tú padre es chileno, tú madre mexicana, tú eres francés pero ahora tienes años viviendo en México, ¿Tú te sientes latinoamericano?
Bueno, no me siento siento latinoamericano. Bueno, sí y no, me siento francés ¡Ja Ja Ja! No sé, es que realmente no logro encontrar una identidad como tampoco nunca logro sentirme bien donde vivo. Aquí estoy en México pero digo, “¡Ay, pero me gustaría irme a otro lugar!”. Siempre estoy pensando en irme a vivir a otro lugar, quizás por mis ancestros nómadas que se escaparon de la guerra y viajaron, quizás lo tengo eso en los genes pero no logro sentirme bien en un lugar ni sentirme de un lugar, es muy difícil para mí. Cuando llego a Francia me encanta, me siento como “¡Ah! ¡Mis amigos, la cultura, los museos, los pintores, los cafecitos, el chocolate caliente!”, todo lo que quieras, pero de repente ya me aburro en un momento y me quiero regresar a México porque ya extrañaba mis buenos tacos. Después voy a Argentina y digo, “¡Ah!¡Por fin el buen dulce de leche y las empanadas!”. Estoy como indeciso.

¿Qué edad tienes ahora?
38. Nací el 29 de octubre.

Tenemos la misma edad. Es algo muy de nuestra generación esa sensación del no lugar.
Sí, tiene que ver también con la época, con las crisis mundiales que están en todas partes y que uno se escapa. México, por ejemplo, es la catástrofe, está lleno de violencia y de contaminación del aire. En Argentina está el tema de la crisis económica. En Francia es terrible porque hay atentados. El mundo está fuerte pero hay esperanza y hay artistas para crear arte que haga bien al alma.

¿Tienes algún lugar especial en el mundo?
El desierto de Atacama en Chile me produce algo que ninguna ciudad o país en el mundo me produce. Es increíble ese desierto, poniendo de lado a los turistas y todo lo que quieras, es un lugar mágico.

¿Cómo te ha influido formar una familia en tu vida y en tu arte?
Mira, yo no podía seguir así. Yo estaba como loco saliendo todas las noches, teniendo amigos con los que ni siquiera me sentía cercano. Cuando iba a un antro y luego llegaba a mi casa energéticamente me sentía mal porque ¿qué es un antro? Toda la gente que llega ahí es para soltar todo el estrés que tuvieron todo el día, entonces nosotros como receptores de energía aspiramos esa energía de estrés y regresas a tu casa peor. Pasas una noche donde la gente se emborrachó, se drogó, quizás tú tomaste algo y te sientes mal al día siguiente. Nunca me sentí bien en los antros, no puedes hablar, cuando quieres tener una conversación profunda con alguien es un borracho y te da flojera porque no puedes profundizar, es simplemente soltar energía, entonces no podía seguir así y tuve ganas de tener una familia. Me concentré y me dije, “No quiero tener un trofeo como mujer, quiero tener una mujer que me corresponda”, entonces conocí a la poetiza Luna y con ella fue muy rápido, después de seis meses estaba embarazada e hicimos ese niño de manera consciente y me cambió la vida completamente porque sabía que íbamos a tener un niño. Fue un día de un eclipse lunar y estuvo increíble, la verdad ese hijo me dio un centro. Ya no salgo nada, soy mucho más productivo, abrí mi estudio de grabación, estoy produciendo muchas bandas. Es mucho más entusiasmante.

¿Qué es para ti el amor hoy en día?
Pues es vivir junto con una persona sin que quiera transformarte sino hacerte progresar. Cuando no hay duda, cuando ves a la persona y no te preguntas ¿Será el amor de mi vida o no? Cuando aunque hayan enojos o todo lo que sea, sabes que esa persona es para ti. Eso es el amor para mí, cuando no hay ninguna duda. Lo que pasa es que la gente sufre de amor mucho porque no quiere estar sola, entonces se encuentran unas parejas que no le corresponden para no estar solos porque son impacientes porque el amor es muy difícil de encontrar, son personas que aparecen una o dos veces en la vida, entonces la gente prefiere tener muchas personas cometiendo muchos errores hasta encontrar la persona correcta pero también pierden mucho tiempo y energía entonces hay que ser paciente.

Durante los últimos años has desarrollado además una carrera como Productor, ¿con quién estás trabajando ahora?
Estoy trabajando con una muchacha de Córboba, Argentina, que se llama Daniela Espala que está sacando su primer disco ahora. También acabo de producirle un disco a una banda argentina que se llama Bandalos Chinos que está por salir pronto. Además estoy trabajando con David Aguilar, el primer disco de Alejandro Arras y con Jumbo, la banda de Monterrey que quiere reinventarse; entonces fui a Monterrey a grabarles un unplugged con violines, trompetas y todo eso. Elijo mis proyectos, no acepto todo, no soy el tipo de productor que acepta todo por dinero. No me interesa hacer pop, por ejemplo; a menos que sea Luis Miguel pero si me deja componerle las canciones, eso sí me daría risa… O si no, Julio Iglesias. Ese tipo de cosas sí me daría mucho gusto, o una especie de Sandro… pop de señores.

Eres un artista bien inquieto, como que no tienes miedo de incursionar en otras áreas
Sí, no tengo miedo. Me apasiona muchísimo. Yo soy una especie de geek que pasa su tiempo viendo videos de Ingenieros de Sonido en Youtube, o viendo por horas instrumentos musicales, compresores o ecualizadores, eso me apasiona muchísimo. Además abrí mi propio estudio en México con puro material vintage.

¿Es ingrato el tema económico cuando se realiza una entrega artística tan grande como la que tú has hecho?
Cuando da dinero hay que apostar porque puedo generar dinero o no, genero pero no soy un pop star, entonces para proyectos como los míos no me dan mucho presupuesto porque es música que no es para un público tan grande y no lo deseo tampoco, a mí me gusta guardar mi ética… no me gusta vender mi pan y no quiero tener vergüenza de nada de lo que haga en la vida. Me pagan mucho más siendo productor que siendo cantante para que sepas. Ser cantante es ingrato pero a la vez te pone en una posición humana y si yo hubiera tenido mucho dinero para hacer mis discos nunca me hubiese atrevido a mezclar discos por ejemplo o nunca hubiera abierto mi propio estudio de grabación. La dificultad me abrió miles de puertas y en realidad me cambió la vida, ahora si me dan millones yo los acepto pero no es mi finalidad.

Hoy en día cuando miras hacia atrás en tu carrera, ¿cómo ves tu etapa de Adanowsky?
Me divertí muchísimo, en verdad me encantó hacerlo y tengo recuerdos memorables. Cada gira fue increíble. Yo tenía el sueño de tener mucho éxito en esa época y ahora es diferente, quiero hacer música que me haga vibrar y si viene o no viene gente no me importa, más me importa disfrutar de eso. Después eso de sonar en radios comerciales como que empecé a pensar, ¿realmente quiero tocar un público de una radio que ni siquiera escucho o quiero realmente sentirme conectado con gente que entiende lo que estoy haciendo? Cambié de rumbo y de ideales pero en verdad fue una época extraordinaria. No voy a dejar de hacer shows entretenidos, siempre me voy a disfrazar. Yo vengo del teatro entonces no puedo hacer un show aburrido, yo tengo que entretener a la gente, es una batalla constante cuando estoy en el escenario ahora.

Ahora que hablas del teatro, tú carrera comenzó actuando en Santa Sangre, la película de tu padre, cuando tenías 8 años y recientemente hiciste de él joven en su más reciente película Poesía sin fin. Además, está el tema de tus videoclips que diriges tú mismo y del cortometraje que hiciste hace unos años. Es como que el cine nunca se fue de ti.
Sí, nunca se fue de mí. Por ahora soy un cineasta frustrado, solo he dirigido mis videos y un corto al que le fue muy bien que se llama The Voice Thief con Asia Argento. Después dejé de dirigir y me dediqué a producir bandas, pero siempre tengo la idea de regresar al cine y dirigir películas. Si lo tengo que hacer a los 50 o 60 años, no importa pero lo haré.

¿Te pesa el apellido Jodorowsky para encarar eso?
No, bueno, yo tuve la experiencia con mi película que dirigí que había gente que decía: “Se parece demasiado a su padre, es como su padre”. Y si no lo haces como tu padre entonces dicen: “¡Ah! No es como su padre”. Lo que haga, la gente lo va a criticar y a mí no me importa. Mi padre no es una sombra; al contrario, es una luz para mí. Es un honor ser su hijo, entonces no me dejo vencer por la crítica.

Sin embargo, te llevó 10 años de tu carrera empezar a usar tu apellido.
Sí, exactamente ¡Ja Ja Ja! Es que mira, yo siempre he amado muchísimo a mi padre pero cuando eres hijo de un artista muy conocido, y además mi padre con los años no es que se hizo menos conocido, se hizo más y más conocido, es como una especie de ícono de una Iglesia, entonces yo necesitaba de alguna manera saber si yo tenía talento o si la gente me veía por mi apellido. Necesitaba esa seguridad, y entonces cambié de nombre e hice todos esos personajes, hice toda una carrera con otro nombre y no toda la gente sabía que Adanowsky era Jodorowsky. Pude existir sin ese apellido. Creo que ya me probé todo lo que tenía que probar, entonces recuperé mi nombre y no quiero escapar de lo que soy.

Es difícil que no haya una influencia de tu padre habiendo crecido con eso
Obviamente tengo una influencia de eso, pero también tengo influencia de todo lo que me mostró como las películas de Kurosawa o de Fellini, y después también yo hice mi propia vida y empecé a llenarme de influencias por mí mismo. Lo que sí es que hay algo seguro y es que yo me parezco muchísimo a él físicamente, de hecho en su película “Poesía sin fin” actué de él cuando era joven y además tengo su apellido. La gente cuando me ve por primera vez lo primero que ven es “el hijo de Jodorowsky”, ven mi cara y están todos impresionados porque lo que ven es el espermatozoide de Jodorowsky. Eso no me lo puedo quitar, pero es una maravilla…. Tú puedes ser el hijo de quien sea y no tener talento, entonces yo agradezco lo que tengo.

Hay una canción de Esencia Solar que se llama “Todo lo más bello” que tiene una frase que resume eso que dices muy bien: “Quiero quitarme esas máscaras y ya no esconder mi verdad”.
Yo me acuerdo que esa canción se la mandé a mi productor, el dueño de la disquera, y él me dijo “Adán, si quieres tocar a la gente popular tienes que cambiar las letras y escribir otras más simples”, y yo dije, “Quiero quitarme esas máscara y ya no esconder mi verdad, ¿Que hay de complicado ahí?”. Entonces regresé a mi casa todo deprimido y empecé a escribir otras letras y me dije, “No puedo realmente escribir letras simples que no digan algo. No puedo escribir letras vacías, eso que me están pidiendo no puedo hacerlo”. Entonces las dejé así.

¿Cómo te imaginas el futuro de Adán Jodorowsky?
Viejo, feliz, creando hasta mi muerte y preparándome a la muerte también, a morir de manera decente.

Las próximas presentaciones de Adán Jodorowsky serán en Argentina, hoy 7 de junio en Buenos Aires y el sábado 9 de junio en Córdoba. Luego entre septiembre y noviembre estará girando por Chile, Perú y Estados Unidos. ¡Atentos aquí para saber fechas!