Los últimos grandes minutos de Christian Benítez fueron contra Monterrey

Uno de los grandes picos en la historia contemporánea del americanismo se vivió en el año de 2013. Nunca se podrá olvidar aquella final entre las Águilas y el Cruz Azul en la que Moisés Muñoz derrumbó los sueños celestes y convirtió el Azteca en un manicomio con aquel remate que acabó desviando Alejandro Castro para llevar a la prórroga el encuentro, mismo que acabaron ganando los azulcremas en penales.

En el campo, el América tuvo al que fue su último gran ídolo: Christian Benítez. Si bien el 'Chucho' no brilló en aquel duelo final ante la Máquina, si fue el artífice del pase a aquella final cuando en semifinales se encargó de destruir a los Rayados del Monterrey. Aquella serie de 180 minutos frente a Rayados bien podría ser los últimos mejores partidos en la vida del atacante ecuatoriano.

Las Águilas del América se encontraron en las semifinales con los Rayados del Monterrey en aquel Clausura 2013. El cuadro que dirigía Miguel Herrera venía de echar en cuartos de final a los Pumas y pese al buen momento que atravesaban los regiomontanos, eran claros candidatos para llegar a la final.

En el juego de ida, la luz de las Águilas la puso Christian Benítez. Con su electrizante estilo y su letal explosividad, el ecuatoriano fue un demonio para la defensa de Rayados. Poco sirvió que Monterrey se pusiera al frente en el marcador con tanto de Humberto Suazo pues el "Chucho" se encargó rápidamente de igualar el marcador y posteriormente darle la vuelta. Tras los 90 minutos iniciales, el juego quedó 2-2 gracias al gol final de Aldo de Nigris.

El "Chucho" podía desatascar un juego en cualquier instante, y contra Monterrey demostró que su nivel le quedaba chico a la Liga MX. En aquel entonces el rumor de su salida del América era ya un secreto a voces, así que la guinda en el pastel con la que decoraría su partida de México era dándole un campeonato al conjunto de Coapa.

Con ese empate, la serie no está decidida pero si muy inclinada a favor del América. Aún no existía el criterio del gol de visitante pero si el de mejor posición en la tabla, así que a las Águilas les bastaba con empatar con cualquier marcador para avanzar a la final.

Víctor Manuel Vucetich anticipaba que la clave para eliminar al América pasaba por detener a la dupla americanista conformada por Raúl Jiménez quien también atravesaba un extraordinario momento de forma, y al propio "Chucho" Benítez. Con Rayados desbordado al frente intentando desequilibrar la eliminatoria a su favor, los espacios para los contragolpes estaban cantados.

En la vuelta el juego fue muy peleado. Fue hasta el segundo tiempo que un tanto de penal convertido Raúl Jiménez encaminó el triunfo azulcrema; Rayados debía abrirse e ir por dos goles para poder eliminar al América en el Estadio Azteca.

Monterrey empató el juego con un gol de Aldo de Nigris, el cual abrió la puerta de los fantasmas que seguían al "Piojo" Herrera quien había sido eliminado en las dos ocasiones previas en la misma fase de semifinales.

Pero la vida no debe ser difícil cuando en tu 'XI' tenías a un futbolista como Christian Benítez. El "Chucho" al igual que en la ida, se hizo presente en el marcador con un contragolpe letal que acabó dejando la pizarra 2-1. El ecuatoriano fue a festejar al banderín de córner, se subió a la publicidad estática, levantó las manos e hizo como que volaba. Aquella recordada imagen fue el último gol en partido regular de Christian Benítez en México. ¿Quién iba a decir que todo lo que en ese momento era felicidad acabaría en una de las tragedias que más nos ha consternado en los últimos años.

Christian Benítez fue la gran figura de aquella eliminatoria. En la final ante Cruz Azul no se hizo presente en el marcador hasta la tanda de penales donde fue uno de los futbolistas que convirtió un gol.

Semanas después, el americanismo lloraba la partida de su gran ídolo rumbo a Qatar, para que meses más tarde llegara la terrible noticia de su fallecimiento. El "Chucho" dejó al América como campeón con un recuerdo que difícilmente se olvidará.

América y Monterrey se volvieron a ver las caras año y medio más tarde, también en semifinales con triunfo global de 3-0. Al igual que sucedió con Cruz Azul, las Águilas obtuvieron el título en el Azteca tras derrotar a los Tigres de la UANL. Seguramente el "Chucho" pudo seguir aquellas victorias, no desde el césped, pero si desde un palco de lujo en las alturas.