Una charla de de política, militancia e independencia con Las Manos de Filippi

Las Manos de Filippi es rock contestatario, poderoso y bailador. Una oda a la celebración y al mismo tiempo a la lucha por los derechos de la clase obrera. Por el que se rompe el culo todo el día trabajando y por la noche tiene que ver como un montón de políticos ineptos se ganan millonadas por dormirse en el trabajo. O por no ir. De hecho son militantes activos del Partido Obrero argentino y aunque le han dedicado muchas canciones a la causa, no les tiemblan las piernas a la hora de salir a las calles y marchar con ellos, entonando una sola voz.

La banda lleva más de 20 años en activo, sin embargo aterrizaron en Colombia apenas hace un par de años con el rótulo de haber sido los creadores de “Sr. Cobranza”, ese tema que llegá a nuestros oídos como un himno de la Bersuit Vergarabat, la antigua banda de Gustavo Cordera quién estará presente este año en el Rock al Parque con su nuevo proyecto. Las Manos de Filippi son ese tipo de grupos que te ponen a saltar y sentir por dentro ese espíritu antisistema, que se mamó de los abusos y en cierta medida nos representa a todos los latinos.

Antes de que nos descontrolemos con su música, tuvimos una charla con “El Cabra”, vocalista de la banda y militante de corazón. Una conversación en la que tratamos temas de política, independencia musical y hasta algo de fútbol.

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NOISEY: ¿Qué significa para ustedes llegar a un escenario tan emblemático como el Rock al Parque?
La Cabra: La verdad es algo que nos llena de mucha alegría y también nos recuerda cómo hace apenas dos años empezamos a llegar a Colombia, así tengamos una trayectoria de 25 años. Todo arrancó por una escala que tuvimos en Venezuela donde hicimos una fecha relámpago y después de eso empezamos a volver. Después logramos tocar en el Festival Viva el Planeta gracias a los chicos de Doctor Krapula. Así fuimos conociendo gente muy buena onda que nos fue apoyando y ahora vamos a tocar en este festival del que todos nos hablaban desde la primera vez que fuimos.

Aparte también van a tocar en una muy buena hora y después de G.B.H, una banda de punk legendaria.
Si, buenísimo. La verdad que todo, el horario, las bandas y ni hablar de la cantidad de gente que va a ese evento. Lo que más queremos es mostrar la banda.

¿Pero ustedes están acostumbrados a tocar frente a este tipo de público tan punkero y tan rockero?
Nuestro público siempre ha sido muy punk, pero la verdad nadie en la banda tiene todavía muy claro que somos (risas). A nosotros nos invitan a muchos festivales punk, venimos de hacer uno en Chile con Flema y Misfits, el público la disfrutó mucho con nosotros.

¿Qué tienen planeado para el Rock al Parque?, ¿qué nos van a venir a presentar el lunes?
Lo que venimos haciendo es una lista bien rockera. Con las manos ya dejamos hace unos meses de meter vientos así que la banda anda aún más rockera con dos guitarras que proponen un nuevo sonido. Los temas nuevos no los vamos a hacer todavía porque son demasiado nuevos (risas), pero ya sabemos que cuando volvamos va a ser con disco nuevo.

¿Por qué decidieron sacar los vientos?
Por un lado porque el saxofonista, que también era el director de esa área, empezó un proyecto solista entonces, se alejó de la banda. Y por otro lado aprovechando que está Gaspar que es un guitarrista tremendo. De hecho en un principio Las Manos era más rock y ahora queremos volver a ese sonido.

¿Cómo han vivido como banda esa transición?
La verdad que fue natural. No hubo nada raro solo que ahora se disfruta cualquier cosa nueva y para nosotros está buenísimo escuchar como tocan Gaspar y Serafín. Gracias a ellos se levantó un poco la participación de las guitarras.

Tu me decías que hace dos años empezaron a explorar Colombia. ¿Qué fue lo que les atrajo del país?, ¿qué conexiones encontraron acá?
Nuestro primer encuentro con el público colombiano fue acá en Argentina, porque a nuestros conciertos van muchos colombianos. Ellos mismos se encargaron de decirnos que teníamos que visitar su país ya que se conocían temas como “Sr. Cobranza” y un poco por eso cuando fuimos por primera vez nos presentabamos como los autores de esa canción. Sabíamos que era una carta que nos podía abrir el camino. Después nos dimos cuenta que allá a la gente le gustaban mucho las canciones con ese estilo.

Tengo entendido que la situación en Argentina está muy complicada con la elección de Macri como presidente. ¿El nuevo disco vendrá alimentado con todos los problemas que se está viviendo en su país?
Si, de hecho justamente el próximo disco se va a llamar Macri. Estará distribuido en tres capítulo y el primero es “La transición” que habla un poco del traspaso del poder de los kirchneristas a los macristas. Es bastante politizado. Después tenemos un segundo capítulo más alegre y de personajes y un tercer capítulo que vamos a ver como será (risas). Lo que sí te puedo decir es que estamos en un momento en el que estamos haciendo canciones bien contestatarias y representativas de la situación política actual. Va a ser bien actual.

Hace unos meses hablé con una banda de Rosario y ellos me decían que la cosa está muy complicada para los artistas y lo estudiantes. ¿Cómo lo han vivido ustedes?
Está muy dificil, acá lo que no se lucha se privatiza. Los estudiantes hace años que crearon La Fuga Piquetera, una agrupación de jóvenes que se involucran no solo en la lucha contra la privatización de la educación sino también se adhieren a luchas obreras, es toda una conciencia por parte de la juventud. En cuanto a los artistas ya depende de irse organizando para que no avancen con la privatización de la cultura que es lo que le quita el trabajo y el apoyo a las nuevas generaciones de artistas.

¿Cómo dirías que se ha reflejado el hecho de que existan tantos jóvenes en pie de lucha en las artes?
Lo que sucedió acá durante muchos años fue que el kirchnerismo cortó a la mayoría de los artistas, sobre todo a los de renombre. Sin embargo por fuera de esa acotación hubo asociaciones de músicos que se organizaron por sus propios intereses y no por lo que quería el gobierno. Esas agrupaciones siguen adelante. Después de lo que pasó en la tragedia de cromañón, los músicos empezaron a bajar de la nada absoluta y se dieron cuenta de que se podían organizar para luchar contra el cierre de las discos, la privatización de la cultura. Hoy en día con el macrismo en el poder pasó que muchas empresas salieron a enfrentar sus conflictos, entre ellos los despidos a patrones que eran kirchneristas. Los medios gráficos eran kirchneristas y apenas subió al poder Macri, echaron a un montón de personas. Por eso se empezaron a hacer festivales donde empezaron a aparecer esos viejos artistas que durante diez años no movieron el culo para ninguna causa y de repente aparecieron. Eso es como una señal positiva porque quiere decir que vuelven esos viejos coptados y es momento de seguir adelante y ser más.

En estos más de 20 años que llevan militando y haciendo música, ¿cuáles dirías que han sido los periodos más complicados?, ¿cómo podrías comparar este periodo con el anterior?
Creo que estamos en un momento muy interesante para organizarse, salir a reclamar y luchar. No hay que luchar contra la mentira del nacional y popular como fue acá. Como ya te digo hubo mucha gente que volvió a la lucha y encima el gobierno que tenemos ahora claramente es de derecha y va a ir directamente a enfrentar a los trabajadores.

Lo bueno de esos momentos de crisis y es que al mismo tiempo son los más creativos. ¿Te parece que eso está pasando?
Aquí la creatividad la usan para trabajar, comprar comida y la verdad es que no está puesta para el arte en estos momentos. Lo que pasa es que entre más avanza la privatización de la cultura y por más que allá jóvenes que trabajen duro en su actividad artística, no hay buenos lugares para mostrar y los medios no apoyan en nada a lo independiente. Creo que urge más la necesidad de organizarse que la necesidad de componer buenas obras.

¿Dirías entonces que la escena musical Argentina está estancada?
En este momento ya está muy a la vista que todo es un gran negocio. Habría que aprovechar esa situación y mostrar que el trabajado de esa organización son los artistas que ahora se tienen que organizar. Más allá de la música que se haga uno tiene un actividad como persona y como ser humano tiene derecho a organizarse.

Ustedes se han mantenido muchos años como independientes y lo que han logrado ha sido por medio de la autogestión. ¿Cómo ha sido ese camino?
Nuestra carrera fue en su mayoría independiente, pero no quiere decir que nosotros cuando hacemos un disco también lo sea. Nuestra independencia está en hacer la música que queremos aunque ofrezcamos nuestra música en el circuito comercial. Creo que esa cuestión de la independencia es algo ya más personal de cada banda, no hay algo que está bien ni algo que está mal. Es una estrategia de saber que es lo que te conviene para que la banda siga existiendo y puedan seguir haciendo música. Nuestra decisión fue siempre hacerlo lo más independiente que podamos pero eso no quiere decir que haya sido fácil ni la única manera. Fue nuestro plan y finalmente es como una empresa en la que tienes que tomar buenas decisiones para seguir andando.

Tengo curiosidad de saber a que están sonando las nuevas bandas argentinas. ¿Me podrías recomendar alguna?
No te olvides que yo soy un viejito (risas) así que te puedo botar cualquier cosa. Una banda que es histórica pero joven es Los Gardelitos, que ahora es un trío en el que toca Eli Suárez, la hija de Corneta que fue el fundador de la banda y falleció hacer unos años. Ahorita andan súper creativos y es rock muy argentino o barrial como le dicen aquí. Para mi ir a tocar a un país como Colombia en el que disfrutan con el tango me pone muy tranquilo.

Ahora en Argentina la noticia es el tema de Messi. ¿Cómo sienten ustedes como argentinos el hecho de que se quiera retirar de la selección?
Nosotros somos críticos a todo el negocio del fútbol así que que haga lo que quiera (risas), lo que se le venga en gana.

Cómo dices que eres un viejitos te quería preguntar sobre tu relación con el cucumelo.
No ya aflojé los trapos. Fue una experiencia de mi juventud con mi mujer y experimentamos con eso a más no poder. Lo usamos un montón pero ahora ya no, son drogas fuertes y ahora me puedo comer un hongo por año pero esos viajes de antes ya no, ni en pedo (risas).

¿Tú estás enterado de lo que está pasando ahorita en Colombia?, ¿cómo viven el tema de los diálogos de paz en Argentina?
Lo veo favorable. Tal vez tan favorable como va a ser para las empresas que quieran avanzar con la minería y todo el plan del agro. Por otro lado también se abren posibilidades para la clase obrera, no sentir esa presión de ser acusados de guerrilleros por salir a reclamar por un sueldo digno. Creo que es el momento de organizarse en los gremios, políticamente y reclamar lo que es de uno.