La mayoría de la gente que conozco está ardida por encontrar playeras de los Ramones, The Clash, Bowie, Los Stones y demás bandas reverenciadas en esas tiendas del centro comercial que vende moda en serie.Claro, ¿a quién no le caga ver a la morrita más fresa de tu salón con una playera de Ramones? O ver a la vieja más pedante de tu trabajo (que se sabe todas las rolas de Paulina Rubio) luciendo una playera de Ziggy Stardust en una foto del instagram mientras espera que la dejen entrar al antro…Creo que la ardidés se vale.Cuando era morro, una playera de The Clash simbolizaba todo lo que creías, todo lo que eras y sobre todo, todas esas cosas que nadie más sabía.Incluso existe una rola de The Germs que se llama "What We Do Is Secret" y eso creo que aclara bastante de qué se trata ser morro: pertenecer, aportar, ser diferente a los demás; esas son las cosas que más te importan cuando estás formando lo que quieres ser en la vida.
Pero los que ya estamos grandes, ¿de verdad nos seguimos ardiendo por las mismas cosas? También de morros nos la pasábamos exigiendo espacios y oportunidades, y cuando por fin llegan esos espacios ¿nos ardemos? Creo que si en estas tiendas venden playeras de Ramones, seguramente de 100 playeras vendidas, sólo 5 personas saben que es de una banda y de esas cinco seguro a dos (o menos) les gusta. Ahora: de esas noventa y ocho playeras vendidas como adorno, puede ser que a alguna de esas personas le entre la curiosidad de saber qué demonios es ese gráfico y se dé el momento de buscar, encontrar, escuchar.¿Qué tal que sí le gusta? ¿Está tan mal que una morra fresa de pronto encuentre en el punk todo lo que le podría faltar en la vida? A mí el punk me salvó, le dio sentido a mi adolescencia y por más exagerado que pueda sonar le dio sentido al resto de mi vida. A mí me gustaría que más gente se salvara con la música y si es una niña frívola y fresa, ¡pues mejor!¿Qué es lo que nos molesta realmente? A algunos les molesta el robo de su identidad, una identidad calcada creo yo. Una playera no te hace distinto, te hace igual. A mi gusto son simples imágenes, imágenes que puedes bajar de internet para tu facebook o una playera comprada por 100 pesos en un centro comercial. Ardernos sólo nos hace igual de radicales que mi tía Cleta y el crucifijo que trae colgado diario en el cuello, señalando, juzgando y condenando a quien no es igual.Las playeras no son más que un instrumento que empezaron a hacer las bandas de rock y punk en los setenta para juntar algo de dinero para poder comer, al final del día un artículo promocional que la gente podía guardar después de ir a un show. Arturo Vega dijo en una entrevista a la revista Vice que cuando él y los Ramones empezaron a hacer las playeras del águila presidencial con bats nadie más las hacía y las hicieron para sacar algo de dinero y caguamear con sus amigos mientras las hacían. Antes de eso las bandas hacían programas de sus shows.¡Sí! Programas como los del teatro con lo que la audiencia iba a escuchar (eso si que no era nada punk). Así que, de tener un programa de la tocada de Eskorbuto, a usar una playera, me quedo con la playera. Al menos la playera hizo enojar a mi mamá muchos años y hoy día me trae más recuerdos al usarla que los que me deja ojear una revista.En resumen: Si a la hipster sabrosa que les queda más cerca y que odian, le ven puesta una playera de los Sex Pistols: mejor acérquense a ella. Al fin de cuentas ya tienen un buen pretexto para sacarle la plática; Si bien, Malcom McLaren y Vivienne Westwood hace muchos años inventaron la "moda" punk, no querían hacer una moda de masas exactamente, y con esto hicieron una declaración cultural que mucha gente adoptó para su vida, porque se sentía identificada con ese sentimiento.Seamos incluyentes y dejemos a más personas formar parte de este desmadre que tanto nos gusta: un pogo con cien personas está muy padre. Con mil, ¡es un desmadre!@rzemog* Estas son las crónicas de un post-adolescente auto nombrado punk, que aunque se esfuerza sigue sin encajar en ningún lado.
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