Foto: Secretaría de Ambiente.
Artículo publicado por VICE Colombia.
Como que en este país ni las ranas pueden vivir tranquilas.Según reveló la Secretaría Distrital de Ambiente de Bogotá, ayer, 7 de noviembre, se encontraron más de 200 especímenes de ranas venenosas metidas en 194 empaques de rollos fotográficos y camufladas en una tula con ropa en un baño del Aeropuerto El Dorado. Se confirmó que los animales iban con rumbo a Alemania pero que los traficantes prefirieron abandonarlas y escapar cuando se vieron cercados por las autoridades.¿Pero qué se hacen con todas esas ranas en Europa? Se preguntarán ustedes… Pues bien, como explicó la misma Secretaría, estos pequeños anfibios tienen un costo aproximado de 6 millones de pesos colombianos cada uno en el mercado negro, por lo que las 216 ranitas que se encontraron vendrían costando en total unos 1.300 millones de pesos —unos 400.000 dólares—. Una cifra gruesa que ha acompañado al que ya es la mayor incautación de anfibios en la historia de la capital.En medio de la inspección de los empaques, se encontraron tres tipos de ranas diferentes: 153 Oophaga histrionica (rana arlequín), 50 Oophaga lehmanni (rana venenosa de Lehmann) y 13 Oophaga selvática (rana kiki), todas endémicas de la región del Pacífico. Como recordó el Distrito en su comunicado, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), "la rana venenosa de Lehmann se encuentra amenazada en categoría de peligro crítico. La rana Kiki está en categoría casi amenazada y la población de la rana Arlequín ha venido decreciendo significativamente".Lo que se sabe hasta el momento es que las ranas originarias de los municipios de Baudó, Tadó y Playa de Oro, en el departamento del Chocó, fueron traídas de Cali hasta Bogotá en carro, y que desde aquí iban a ser enviadas a Alemania donde se les iban a vender a coleccionistas o a personas interesadas en su veneno. Tras su rescate, las ranas se encuentran en el Centro de Recepción de Flora y Fauna Silvestre en Bogotá y la Policía está adelantando las investigaciones para dar con los traficantes.
Como que en este país ni las ranas pueden vivir tranquilas.Según reveló la Secretaría Distrital de Ambiente de Bogotá, ayer, 7 de noviembre, se encontraron más de 200 especímenes de ranas venenosas metidas en 194 empaques de rollos fotográficos y camufladas en una tula con ropa en un baño del Aeropuerto El Dorado. Se confirmó que los animales iban con rumbo a Alemania pero que los traficantes prefirieron abandonarlas y escapar cuando se vieron cercados por las autoridades.¿Pero qué se hacen con todas esas ranas en Europa? Se preguntarán ustedes… Pues bien, como explicó la misma Secretaría, estos pequeños anfibios tienen un costo aproximado de 6 millones de pesos colombianos cada uno en el mercado negro, por lo que las 216 ranitas que se encontraron vendrían costando en total unos 1.300 millones de pesos —unos 400.000 dólares—. Una cifra gruesa que ha acompañado al que ya es la mayor incautación de anfibios en la historia de la capital.En medio de la inspección de los empaques, se encontraron tres tipos de ranas diferentes: 153 Oophaga histrionica (rana arlequín), 50 Oophaga lehmanni (rana venenosa de Lehmann) y 13 Oophaga selvática (rana kiki), todas endémicas de la región del Pacífico. Como recordó el Distrito en su comunicado, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), "la rana venenosa de Lehmann se encuentra amenazada en categoría de peligro crítico. La rana Kiki está en categoría casi amenazada y la población de la rana Arlequín ha venido decreciendo significativamente".Lo que se sabe hasta el momento es que las ranas originarias de los municipios de Baudó, Tadó y Playa de Oro, en el departamento del Chocó, fueron traídas de Cali hasta Bogotá en carro, y que desde aquí iban a ser enviadas a Alemania donde se les iban a vender a coleccionistas o a personas interesadas en su veneno. Tras su rescate, las ranas se encuentran en el Centro de Recepción de Flora y Fauna Silvestre en Bogotá y la Policía está adelantando las investigaciones para dar con los traficantes.