Los Mamalones
Luces neón, sudor y reguetón: los Mamalones de Acapulco
En cuanto subí fue una locura: todo brillaba y las luces neón que cubrían los asientos parpadeaban al ritmo de una cumbia.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
En cuanto subí fue una locura: todo brillaba y las luces neón que cubrían los asientos parpadeaban al ritmo de una cumbia.