Gisela Pérez de Acha
Internet: el código es tan sexista como nosotros
Porque la vida digital no es tan distinta de la offline.
Por qué debería importarte el TLCAN y su negociación
Siete preguntas que siempre has tenido sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
El gobierno mexicano espía para censurar e intimidar
En México el abuso de herramientas de hackeo en contra de activistas y periodistas es una política sistemática de intimidación y hostigamiento, a pesar de ser ilegal.
Sobre la gordofobia contra Carla Morrison
La complexión corporal puede ser un problema de violencia de género. Y el cuerpo un espacio de rebelión y disidencia.
Es momento de dejar de ignorar la violencia de género
Tras el escándalo de acoso sexual vivido este fin de semana en el programa ATM, esta es la oportunidad para que esas conductas se dejen de normalizar.
Protestas en Buenos Aires por la muerte de Nisman
El día de ayer, 19 de enero, el fiscal argentino Alberto Nisman fue encontrado muerto en el baño de su departamento en Puerto Madero.
La muerte de 'Charlie Hebdo'
Hoy murieron valientes e irreverentes periodistas del semanario satírico francés. Hoy murieron, en manos de extremistas islámicos, activistas y militantes por la libertad de expresión que defendieron sus ideales hasta el fin de sus días. Hoy murieron...
Festival Antes: una propuesta inacabada
El Festival Antes emerge como un espacio disidente del branding a través del cual nuestra generación consume música.
Funk My Jesus: tetas, culos, drogas y sacerdotes en Acapulco
¿Qué hacer cuando una crítica se convierte en parte del problema, pero se acepta abiertamente como tal? Esta y otras sesudas preguntas nos trajo el nuevo video de la agrupación mexicana.
Música Revolucionaria
El legado de la música que quiso cambiar al mundo. Un viaje sonoro por las mayores revoluciones sociales de nuestra era.
Have you met… Miss Mara?
“Yo no soy una DJ de música electrónica”, fue lo primero que me dijo Miss Mara cuando llegamos al café donde quedamos de vernos.
Lady Gaga en Burqa
Lástima que le le falló saber que no fue la primera en hacerlo y que Vogue, Dior y Viktor & Rolf lo hicieron antes que ella.