El lugar que escogieron fue poco convencional, por decir lo menos. Estaba escondido varios kilómetros al fondo de una carretera destapada de un carril que se dirigía a Solstice Canyon. Tiempo atrás, el rancho había pertenecido a los dueños de la Stetson Hat Company, quienes lo usaban como campo de cacería. La casa principal, construida a principios del siglo pasado, "se veía como una cabaña", dijo Davis."Estaba rodeado de árboles", recordó Shannon Larkin, actual baterista de la banda de metal Godsmack, que en ese momento grabó baterías en Indigo para Amen y Vanilla Ice. "Uno se sentía en medio de un bosque". La fauna silvestre solía inmiscuirse al rancho, cosa que no siempre era bienvenida; durante la grabación del álbum debut de Slipknot, un zorrillo roció la ventana que daba contra la única ducha del estudio. "Toda la sesión de grabación de Slipknot apestó", recordó su cofundador y percusionista Shawn "Clown" Crahan."Terminábamos los tracks completamente sudados y luego salíamos a caminar afuera a este lugar hermoso, perfecto, lleno de luz, donde es muy difícil ser un punk-rocker enojado", dijo Larkin, el baterista de Godsmack. "Era un equilibrio, un equilibrio perfecto".
Robinson insiste en que su enfoque tenía buenas intenciones y que quería que los músicos dieran lo mejor de sí mismos. "La idea era que fuera hermoso y contundente", dijo. "Y si sentía que la contundencia se estaba apaciguando yo— ¡rrrah!". Hizo un pequeño rugido, acompañado de una risa nerviosa y de autodesprecio. "La gente ha convertido mi método en historias tontas de violencia, o cosas así, para hacerlo sonar mejor, pero mi intención era dar más vida, más fuego".Bajo el mando de Robinson, las sesiones de grabación del álbum debut de Korn llegaron a lugares muy oscuros. Davis, el cantante y principal escritor de letras de la banda, prefería escribir canciones que le dejaran "gritar sobre la horrible infancia que vivió", escribió el guitarrista Brian "Head" Welch en su biografía de 2007, Save Me From Myself. Sus compañeros de banda lo ayudaron: "Todos nos sentimos conectados de alguna manera porque todos compartimos algún tipo de dolor de infancia", escribió Welch. "El dolor de ser rechazados, de ser acosados, el dolor de no entender el amor que nuestros padres sentían por nosotros. Todos tuvimos problemas similares con nuestros padres en nuestra infancia… se sintió bien estar enojado y dejar que todo saliera a través de nuestra música pesada"."La gente ha convertido mi método en historias tontas de violencia, o cosas así, para hacerlo sonar mejor, pero mi intención era dar más vida, más fuego".
Aunque años después Davis llamaría algunas veces, un poco bromeando, a Robinson como un "sádico", él le da todo el crédito al productor por ayudarle a sacar tantas emociones viscerales con su voz. "Él sabía como meterse en tu cabeza e inspirarte y hacerte querer lograr algo grandioso", dijo. "No era divertido. Pero así es que lo hace Ross".Robinson no pide disculpas por haber capturado en cinta el trauma de Davis. "Mi intención siempre fue crear un espacio seguro, un lugar en el que él no tuviera que contenerse", dijo Robinson. "Uno no canta así con un imbécil en el cuarto".El álbum debut de Korn, que fue lanzado en octubre de 1994, no cambió el mundo del metal de la noche a la mañana. Sus sencillos casi no sonaron en radio, y las publicaciones que se molestaron en reseñarlo quedaron completamente desconcertadas; el L.A. Times dijo que la banda parecía habitar un "universo de pesadillas aislado" en el que "golpeaban colectivamente sus cabezas contra puertas que ni siquiera podían ver". Pero la gente de la industria percibió la mezcla única de groove metal, grunge y hip-hop, y querían saber quiénes estaban detrás de eso.Una de las primeras bandas en interesarse por ellos fue Sepultura, una grupo de thrash metal de Brasil que por su parte ya había empezado a gravitar más hacia un estilo más groovero. Después de escuchar a Korn y a otro proyecto emergente del nu metal, Deftones, "empezamos a bajar nuestras afinaciones", dijo el guitarrista de Sepultura Andreas Kisser, "yendo por el groove; más partes grooveras en vez de partes de death metal rápido"."Él sabía como meterse en tu cabeza e inspirarte y hacerte querer lograr algo grandioso", dijo. "No era divertido. Pero así es que lo hace Ross".
No ayudaba que casi todos en el rancho se drogaran constantemente; con la notable excepción de Robinson, un adicto a la salud cuya substancia favorita era la hierba de trigo. Las bandas habían estado siguiendo los pasos de John Barrymore en Indigo desde el comienzo. El trago y la hierba eran omnipresentes y tanto Welch como Davis admitieron haber consumido metanfetaminas durante la grabación del primer álbum de Korn. En medio de las maratónicas sesiones de 1998, "todos consumimos drogas y bebimos; no era un secreto", dijo el baterista de Amen, Shannon Larkin."Me estaba volviendo loco", dijo Casey Chaos. "Una mierda tipo The Shining… con las paredes cubiertas de sangre y mierda y pedazos de papel".
Para 2001, cuando bandas como Linkin Park o Incubus ya tomaron elementos de nu metal para insertarlo en el rock radial mainstream, Robinson había pasado a otros estudios y a otros géneros. Produjo álbumes para The Cure y Tech N9ne, y trabajó con nuevas bandas que encontraba en MySpace. Volvió de vez en cuando al nu metal, pero nunca a Indigo."Creo que las drogas eran algo pesado ahí", dijo cuando le pregunté por qué había dejado de trabajar en el rancho. "Y fui tan ingenuo que no me di cuenta [al comienzo]". Pero al final, eso empezó a afectar la calidad de su trabajo. Los equipos alguna vez prístinos, se encontraban al borde del colapso; los ingenieros como Johnson, que en un momento fueron los mejores de la industria, habían quedado fuera de juego. "No podía hacer una primera mezcla y mandarla sin que tuviera algún error", dijo Robinson. Hasta el día de hoy, él suena arrepentido por cómo terminó su tiempo en Indigo: "es desgarrador".La relación de Robinson con el género que él ayudó a formar sigue siendo complicada. En 2016 escribió el tuit: "No hago bandas que copien a Korn. Ese estilo es un cadaver podrido de mi pasado". Sin embargo, cuando hablamos por teléfono hace poco en una mañana de agosto, fue más prudente. "Para mí fue algo separado" del nu metal, dijo de los álbumes que grabó en Indigo Ranch. "Fue algo separado del resto del mundo. Y luego otras bandas tomarían esto como fórmula y dejó de sentirse auténtico". Eso se extendió a proyectos con los que él trabajó —aunque se negó a nombrarlos—, que Robinson asegura que se "estaban convirtiendo en, ya sabes, un estilo de vida tipo Mötley Crüe, de "Girls, Girls, Girls"; y era algo completamente distinto cuando lo empezamos". Y volvió a reír nerviosamente. "Pero sí, estoy orgulloso de todo eso".Y sin su mejor cliente, Indigo Ranch empezó a languidecer. El comienzo del nuevo milenio fue complicado para estudios vieja escuela con equipos análogos y, en general, para toda la industria de la música. "Creo que esta cosa de iTunes nos sacó de la industria", dijo Julie, la viuda de Kaplan. "Todo el mundo estaba descargando, así que él no recibía sus regalías".Richard Kaplan murió de leucemia en noviembre de 2014 a los 68 años. Ocho años antes, había vendido Indigo Ranch por 2,85 millones de dólares a una pareja de un fondo fiduciario, según Julie. "El rancho se estaba convirtiendo en una carga", dijo el ingeniero y diseñador Chris Brunt, quien mantuvo el contacto con su antiguo jefe hasta su muerte.A menos de un año de que Kaplan vendiera Indigo Ranch a sus nuevos dueños, el incendio de Corral Fire azotó todo el Solstice Canyon y destruyó todo a su paso. Para ese entonces, todos los equipos de Kaplan ya se habían trasteado; todos menos el grand piano de Neil Diamond, el cual habían comprado los nuevos dueños."La tierra había sido purgada", dijo Rob Agnello sobre el incendio que acabó con Indigo Ranch. Agregó que Solstice Canyon se llamaba así por las ceremonias de los solsticios de invierno y verano que celebraban con música los indígenas Chumash, siglos antes de los Stetsons o Kaplan o Pinder. "Así que siempre creí que todo eso vino de la tierra, la música de ahí". La era de Indigo Ranch, cree Agnello, "había sido cosa del destino".Julie Kaplan recuerda el día exacto en que su esposo se rehabilitó: abril 1 de 1999, poco después de las extenuantes sesiones con Amen, Slipknot y Machine Head. La sede de Malibú de Alcohólicos Anónimos, donde Richard Kaplan luego sería tesorero, conmemoraba su aniversario unos meses antes ese mismo año. "Llevaría 19 años limpio y sobrio", Julie dijo orgullosa.Durante los últimos 15 años de su vida, Kaplan se convirtió en una figura querida en la comunidad de AA de Malibú, acompañando a mucho otros alcohólicos en su proceso para rehabilitarse. "Se convirtió en alguien fundamental para ayudar a muchas otras personas"", dijo Chris Brunt. En su funeral, "noventa por ciento de las personas ahí no tenían nada que ver con la industria de la música. Habían sido personas a las que él había ayudado".“It was separate from the rest of the world," Robinson says of the albums he recorded at Indigo Ranch. "And then there were bands that would take the formula, and it didn’t feel authentic.”
Muchos de los músicos e ingenieros que pasaron por Indigo Ranch también se rehabilitaron. Chuck Johnson dejó el rancho casi al mismo tiempo que Robinson y se rehabilitó en 2004. Después de una temporada en rehab y de unirse a AA, Larkin se les unió a comienzos de 2016. "Todos pasamos por muchas mierdas", dijo Davis, de Korn, cuya banda está completamente sobria ahora. "Yo me rehabilité primero. El otro mes cumplo 20 años" (Después de entrevistar a Davis para este artículo, su segunda esposa, Deven Davis, murió el 17 de agosto por causas desconocidas. El 23 de agosto Jonathan publicó una declaración frente a su muerte, en la que dice que "ella tuvo una enfermedad mental muy seria y su adicción había sido un efecto secundario").Uno de los últimos actos de Kaplan, antes de morir, fue ceder el nombre de Indigo Ranch al Beach House Treatment Centers, un grupo de viviendas para rehabilitados en Malibú. El nuevo Indigo Ranch, ubicado a 16 kilómetros del original, es un grupo de casas a lo largo de casi tres hectáreas, con piscina y canchas de tenis; y un estudio de grabación, solo para los residentes. "Creemos que podemos conectarnos con los clientes por medio de la música", dijo el cofundador Charlie Bentz, quien fue muy amigo de Kaplan gracias a AA.Davis, quien perdió contacto con Kaplan después de varios años, se alegra por su legado. "Es genial. Me alegra que se haya rehabilitado. Es bueno. Le gustaba divertirse, ¿pero a quién no?", dijo Davis. "Ese era el rock ’n’ roll".Andy Hermann es un escritor y editor radicado en Los Ángeles. Síguelo en Twitter."Le gustaba divertirse, ¿pero a quién no?", dijo Davis. "Ese era el rock ’n’ roll".