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Música

Dave Lombardo de Fantômas y Slayer nos habló de música latina, Mike Patton y sus gustos culpables

Le gusta mucho Andrea Bocelli. En serio.

Quizá el caso de Slayer haya sido en mi media adolescencia, un disparador de intereses que fueron más allá de ser seguidor de la banda más maléfica que pisó la tierra. Siempre me fue por demás llamativo que el 50% de este ente diabólico fue constituido por miembros de origen latino. Tom Araya (cantante y bajista) nació en Viña Del Mar, Chile y Dave Lombardo (baterista original) en la tropical y sabrosona La Habana, en Cuba. ¿Cómo podían sonar tan “blancos”, satánicos y amenazadores? La pregunta sigue teniendo una respuesta difusa para mí, aún después de esta entrevista de 35 minutos con un Lombardo que destila latinismo en el brillo de sus apreciaciones y en su acento brutalmente caribeño.

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Sobre el fin de esta semana Noisey estará cubriendo la primera edición del Rockout fest en Santiago de Chile, un festival en el que los treintañeros dejarán de envidiar la forma en que los más jóvenes se divierten en los mega eventos de hoy. Estarán Devo, Melvins, Helmet, Primus, Thurston Moore y la vuelta de Fantômas –donde militan Mike Patton de Faith No More, Trevor Dunn de Mr. Bungle, Buzz Osborne de Melvins y el señor Lombardo- luego de cinco años y debutando en suelo chileno en una exclusiva lógica: Mike Patton podría ser presidente en Chile si se lo propusiera.

¿Cómo te sientes respecto de volver a tocar con Fantômas y en un lugar donde nunca se habían presentado?

Fantômas es una banda que consiste en cuatro músicos maravillosos, no puedo estar más feliz por esto. Mike y yo hemos estado hablando en los últimos dos o tres años, pensando en volver a juntarnos. Finalmente me llamó y me dijo “Dave, hagamos un festival y un show en un pequeño club en Santiago de Chile, pasémonos una semana allí ensayando”. ¡Mi felicidad tocó el más allá! ¡Me enfervoricé! ¡Sí, por fin estaremos juntos de nuevo! Estoy en un lugar muy cómodo hoy, y claro, tocar en Santiago y hablar español con los chilenos será divertido.

¿Prefieres seguir la nota en español?

Sí, si quieres podemos hacerla en español. Quizá me trabe y te diga algo en inglés, pero vamos, sigamos en español.

Bien, el Rockout fest es una suerte de evento de rock de culto ¿sabes de los otros grupos que integran el lineup?

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¡Sí! Está Devo y yo amo a Devo. No sé si están los miembros originales, pero no me importa: ¡es Devo! Quiero verlos tocar, estoy muy entusiasmado con eso. Vamos a pasar un tiempo muy bueno el día del festival, yo quiero ver a todas las bandas que pueda.

Ok, no te pierdas a Cómo Asesinar A Felipes de Chile, te los recomiendo.

Tendré que verlos, entonces.

Hace diez años le pregunté a Buzz Osborne qué había sentido cuando Mike Patton lo llamó para unirse a Fantômas, y la respuesta fue genial -Nota: “tuve una erección y me cagué encima al mismo tiempo”, declaró el tipo al que se lo ubica más veces como el Bob Patiño del rock experimental y menos como el mentor de Kurt Cobain- ¿Qué fue lo que tú sentiste cuando Patton te llamó para unirte al grupo?

Conocí a Mike un año antes de que me llame. Era la última época de Faith No More y yo estaba aquí en Hollywood. Fui a un show de ellos, me lo encontré, conversamos, recuerdo que estaba Robert Trujillo también por ahí. Un año después se comunicó conmigo. Yo había sido recomendado por Igor Cavalera; Mike le mandó la música de Fantômas a Igor primero pero él le fue sincero,“Oh, Mike, esto no es para mí. Esto es una cosa para Lombardo, él sí le va a gustar y lo van a poder hacer”, le dijo. Fui muy feliz cuando me llamó, pensé que la música era muy extraña, pero la entendí perfectamente, leí claramente lo que él quería lograr con el grupo. Estaba extasiado, ¿sabes? ¡Mike Patton! No hay nadie que cante como él en el mundo: es el mejor. Es un honor tocar con él.

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¿Hay chances de que graben un nuevo disco?

Hemos hablado un poquito, Mike tiene algunas ideas, pero no sé si ha grabado o escrito música para un nuevo disco. Hay conversaciones, pero nada definitivo.

Siendo una música ciertamente compleja, ¿cuánto de disciplina hay en la forma de trabajar de Fantômas?

Mike escribe toda la música. Esto es lo que encuentro increíble y es lo que lo define como un gran cantante y compositor. Él escribe la batería, el bajo, la guitarra, la voz, todo. Deja un pequeño espacio para que nosotros improvisemos, pero el 98% de la música ya está escrita cuando nos llega al resto. Me encanta el balance que tiene la banda, Mike tiene muy en claro que es lo que se necesita; realmente no necesita ninguna ayuda de nosotros.

Hace poco he visto un entrevista en la que declarabas ser un músico de avant-garde ¿cómo llegaste a esa conclusión?

Llegue a ese pensamiento porque no tengo miedos. No temo a ningún género musical. Ni a ningún tipo de persona, incluidos los metalheads, que son parte de un sólo género y no les gusta cuando experimentas con otros estilos. No me importa a quien pueda o no gustarle lo que hago, sólo quiero hacer lo que quiero. Sigo mis sentimientos en cuanto a mi arte y si estos me hacen feliz, es porque están “musicalmente bien”.

Entraste por la puerta grande al avant-garde colaborando con John Zorn.

Antes de que Mike me presente a John Zorn, ya me había dado cuenta que yo tenía una habilidad para colaborar con este tipo de músicos. Entiendo el avant-garde muy bien, es un lenguaje musical compatible con mi mentalidad. Otro factor importante: los músicos avant-garde podemos improvisar con facilidad y ese es un talento que no muchos músicos tienen, sobre todo en el metal. Pienso que esto es esencial para poder trabajar con alguien como John Zorn.

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Tu tiempo en Slayer ¿funcionó para ti como un ejercicio enriquecedor en lo musical o sólo como un entrenamiento físico?

La música de Slayer es muy demandante físicamente, mientras que la de Fantômas o Zorn tienen más que ver con la concentración. Haber estado en Slayer me ayudó a establecer mi carrera, pero mi curiosidad personal y el hecho de colaborar con distintos músicos me abrió la cabeza, me dio creatividad y en definitiva me convirtió en un mejor artista.

En 2004 reemplazaste a Lars Ulrich en un show de Metallica. Déjame tachar otro pendiente y darte las gracias por haberlos hecho sonar bien por primera vez en 25 años.

(Risas, muchas) Sí, la pasamos muy bien ese día. Y muchos fans quedaron encantados con aquellas versiones.

Yo soy un fan de la primera época de Metallica, pero hoy en día no puedo escucharlos en vivo por lo mal que toca Lars Ulrich.

Claro, sí, pero… tú sabes Lars es un músico increíble, conoce la música muy bien, el tiene un gran talento como arreglador, es una parte vital de Metallica.

Te doy crédito en lo que dices, pero la verdad es que creo que en vivo está tocando muy mal.

Te entiendo, mucho me dicen eso, pero yo no le presto atención.

Fuiste un Slayer durante 22 años ¿Alguna vez estuviste metido en el satanismo?

Nunca, nunca, nunca (categórico). Eso es algo en lo que no me meto. Yo le tengo respeto a lo espiritual y no me meto en nada de eso.

Estás cerca de cumplir 50 años ¿cuánto tiempo más tocarás con la fuerza que lo haces ahora? ¿Piensas tocar en el futuro música más “tranquila”?

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Es algo que suelo pensar. Creo que voy a seguir tocando hasta que ya no pueda hacerlo. Seguiré creando música y girando hasta el final, quizá hasta los 75 u 80 años. Siempre tocaré música fuerte. Uno va basándose en la salud cuando piensa en esto y yo me siento bien, así que no hay razón para no tocar música enérgica y complicada. Soy muy optimista y creo que habrá mucha música de Lombardo en el futuro.

Eres reconocido como el rey del doble bombo, uno de los bateristas más bestias del metal, al mismo tiempo tienes raíces latinas y escribes música para Disney. ¿Crees que las personas multifacéticas pueden salvar al mundo?

¡El mundo es una cosa muy grande para salvar! (ríe) Es bueno ser creativo y abierto de mente para lidiar con las situaciones problemáticas. Si yo necesito un ritmo para una canción, me servirá saber de muchos tipos de ritmos distintos para encontrar el que quede perfecto. Sí, los multifacéticos sirven para eso.

¿Cuáles son tu más sorprendentes “guilty pleasures” musicales?

A mí me gustan muchos géneros musicales, de todas partes del mundo. Música de Persia, música Latina, Blues, Rock, música clásica contemporánea, avant-garde. ¡De todo! Desde Billie Holiday a The Locust y todo entre medias. Para ser un músico completo hay que prestarle atención a todos los estilos posibles.

Pero que te guste The Locust o Billie Holiday no da vergüenza ni culpa. ¿Hay algo más mainstream o incluso mediocre que pueda gustarte? ¿Lady Gaga o algo así?

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(Risas) ¡No! Lady Gaga tiene canciones muy buenas, escribe muy bien. Fui un concierto hace poco y me impresioné que fuera tan buen músico. Tocaba el piano, cantaba, la vi tocar en TV con Elton John, me di cuenta que no es como Britney Spears, ella es real. Pero no tengo ningún disco suyo.

¿Y de música latina?

No, pero me gusta mucho Andrea Bocelli. Me encanta. Su disco Amore es muy bonito. Estuve en Europa hace poco escuchando ese disco muchísimo. Su voz me recuerda a la de Mike Patton, de algún modo.

Tu familia llegó a Estados Unidos cuando tenías dos años. Los Lombardos ¿todavía mantienen costumbres latinas?

Bueno, cuando era niño, mi casa era cubana. Salías por la puerta a Estados Unidos, pero entrabas y era Cuba. En lo de mi mamá y mi papá teníamos arroz blanco, frijoles negros, siempre. Era Cuba, la comida, la música, las tradiciones. Siempre hablábamos español, por eso a mí me quedó. Mi mamá y mi papá no aprendieron el inglés, ella lo entiende un poco, pero él trabajó, compró su casa, se retiró y sólo aprendió malas palabras en inglés. ¡Eso era lo único necesario! (risas).