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¿Por qué pesó tanto la localía? Una crónica de la Batalla de los Gallos 2016

El evento más importante de batallas de freestyle tuvo su final el sábado pasado en Lima, Perú. Revisamos su desarrollo, sus aciertos y sus fallos.

Foto de ariba: Enrique Castro Mendivil

El sábado pasado se llevó a cabo la final internacional de Red Bull Batalla de los Gallos 2016 en la ciudad de Lima, Perú ante un impresionante aforo de 24 mil personas más unas trescientas mil repartidas en Hispanoamérica a través de la transmisión en vivo. Nunca ha habido un evento de batallas de freestyle con tanta gente, probablemente en la historia de las batallas de freestyle, no sólo en español sino en general. Si hubiera uno que pudiera competir en aforo, sería la final de Red Bull Batalla de los Gallos 2015, así que estamos ante el monopolio absoluto en cuestión de batallas de freestyle en la actualidad. 16 raperos de 11 países diferentes: México, Perú, Argentina, España, Chile, Bolivia, Costa Rica, Panamá, Colombia, Cuba y Venezuela, subieron al escenario para demostrar su talento como freestylers. Pero fue Skone, de España, quien se ganó decorosamente el certamen.

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Foto: Fabio Piva

Además de haber sido una producción gigante, con un escenario increíble, un sonido nítido y una coordinación como espectáculo sin mácula, fue un momento realmente emocionante. Nada se compara con la experiencia de haber estado ahí, junto al mar de Lima, rodeado de pura alegría, de gente de todos lados y con la expectativa acumulada de todo el año por ver a los gallos rifando haciendo lo que saben hacer mejor: destruir a su oponente con rimas fuertes, con actitud bien plantada en el escenario y con puro ingenio en tiempo real.

Foto: Enrique Castro Mendivil

Aunque el evento comenzó de manera puntual a las 6 de la tarde, hora local, llegamos desde tres horas antes al lugar. El ambiente era, como sucede en este tipo de ocasiones, familiar. Batalla de Gallos, al ser la única producción de su tipo, ha generado una comunidad a su alrededor que tiene oportunidad de reunirse cada año en un país diferente de habla hispana, lo que hizo que los abrazos no se hicieran esperar y que comenzara esta fiesta, donde todos estábamos charlando, conociendo gente nueva, intercambiando opiniones, argumentado sobre favoritos, reencontrándonos con los amigos.

Foto: Fabio Piva

Y bueno, entramos en materia. Cada año, la manera en cómo se escogen a los gallos varía un poco. A veces se ha hecho encima del escenario, y en cada batalla se escoge a cada gallo. A veces se le ha pedido a un gallo que sea él quien escoja a su rival. Y en esta ocasión, se hizo un sorteo antes, frente a una pizarra donde estaba trazado el octagonal de batallas. Y los tiros quedaron concertados desde antes de que subieran al escenario.

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Foto: Enrique Castro Mendivil

Hay que hacer un paréntesis para hablar al respecto de esto. Dado que la Batalla de los gallos es un evento tan importante, con una producción tan impresionante, es un fallo en su contra, en términos de legitimidad en la escena que han construido ellos mismos, que no exista una sistematización y un mismo método para escoger la manera en que se van a enfrentar los gallos en cada final. Este año se celebraron diez de que se lleve a cabo este certamen. Es tiempo de que se pongan por escrito algunas reglas y que siempre se haga del mismo modo. Un simple manual. Una sencilla guía de pasos a seguir y la cual sea del conocimiento anticipado y general de todos, que sea transparente y sencilla. Creo que el problema no es tanto la transparencia (supongo que nadie la pone en duda), sino que no hay una razón real para que cada edición sea diferente la manera en cómo se van a escoger a los gallos.

Foto: Fabio Piva

Una vez que se llevó a cabo el sorteo, resultó que el primer tiro de la noche sería el local más fuerte de los dos que participaron, Jota, contra Aczino. Entendamos una cosa: Aczino es el diablo en esta arena. El coco. Es el MC más temido y uno de los favoritos de esta edición, como lo ha sido en las otras ocasiones que ha participado en este certamen. Si no el único, que ciertamente sería falso decir que es el único, sí es siempre uno de los dos o tres más fuertes. Y bueno, el local es el local y en la historia de este certamen ha tenido siempre un peso terrible. Es una estadística.

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Foto: Fabio Piva

Ahora, el público en realidad fue un público comprometido con el evento. Pero resulta un caso particular el de la primera batalla, donde los nervios y la presión acumulada, hicieron que su participación jugara un papel decisivo. Tal vez nunca como este año pesó en el caso de la primera batalla la localía y el público. Su actitud fue realmente agresiva. Y pues nadie los culpa: su gallo se estaba enfrentando contra el fuckin Aczino. Y además, siempre la primera batalla es la más difícil y la más difícil de juecear. Porque es justo decir que después los ánimos se calmaron lo suficiente y el desarrollo del evento estuvo dentro de lo normal.

Aczino Vs Jota. Foto: Fabio Piva

Pero pues una vez que se decidió en el sorteo frente a la pizarra el octagonal, y antes de que comenzara el primer tiro, la gente se puso a cantar el himno nacional peruano. Fue una escena increíblemente conmovedora, se te ponía la piel de gallina, realmente una entrega hermosa de la gente al momento. Y es perfectamente entendible, incluso es sano, si tomamos en cuenta que es la primera vez que este certamen se lleva a cabo en Perú y que es un evento que ayuda a fortificar las escenas locales y que siempre hay una expectativa gigante. Pero, de nuevo, el tema aquí es generar dinámicas que blinden al certamen del peso que pueda o no tener el público local al momento de que los jueces decidan. Y yo no tengo una solución a este problema. He escuchado que debería hacerse la final internacional en una sede que no tenga local. Pero eso no va a pasar. Por obvias razones mercadológicas.  Lo que es un hecho, es que más que nunca es importante poner sobre la mesa el tema y discutirlo abiertamente a todos niveles de la comunidad de freestyle en español. Porque pues a todos nos gusta Batalla de gallos. La cosa es que siga creciendo. Todos ganamos si se blinda la localía.

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Sobre su tiro, Aczino después dijo: "Me sentí bien. Fue muy intenso, el público estuvo metido muy fuerte y tuve que batallar con eso. Me hubiera gustado haber tenido más neutralidad. Fue un reto competir con el MC local y eso me gustó, el papel que di fue bueno. Seguiremos luchando por dejar a México en los lugares más altos del freestyle para mantener la escena. Para México espero una batalla legendaria". Para prueba del descontento, nótese la cantidad de pulgares arriba contra la cantidad de pulgares abajo (más los comments) en el video de arriba.

Foto: Fabio Piva

Y bueno, ya. Perdió Aczino y no fue necesariamente un mal fallo por parte del jurado. Lo que sí, es que marcó el ánimo para el resto del concurso y toda la raza mexa en el streaming con justa razón se puso a mentar madres y muchos creo que ahora odian al público peruano o, al menos, no lo toman en serio. Pero que tampoco mamen: el público mexa siempre ha sido súper palero y a mucha gente que ha venido a batallar a tierras mexicanas, le ha pesado terriblemente el público mexa. Si no, pregúntenle a Invert, a Mcklopedia, a Errece, y a varios más. Es más, hasta a mi raza chida del otro lado, como Denter, los abuchean o guardan sepulcral silencio cuando están arriba rifando.

Lo que sí es que, como en cualquier contexto, en el mundo de las batallas se generan historias, mitologías e inercias, y sin duda que perdiera Aczino en la primera bajó los ánimos, al menos para el resto de los gallos. O si no, así se sintió desde abajo. Siguieron los octavos y el colombiano Valles-T le ganó al cubano El Ciudadano. El chileno Droser le ganó al costarricense Cezhar. El mexicano Jony Beltrán le ganó al madrileño Chuty en el que para muchos fue el mejor tiro de la noche. Sin duda fue el mejor de octavos y el único que mereció réplica. Y fue cuando comenzó formalmente el certamen. El boliviano Shadow perdió contra el otro local, Gasper. El argentino Papo le ganó al venezolano Lancer, y el último tiro de octavos lo ganó el español Skone contra el chileno Tom Crowley.

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En los cuartos de final los tiros fueron bastante vistosos. El local Jota le ganó fácilmente al colombiano Valles-T. Después Jony Beltrán le ganó al chileno Droser. Y fue el segundo tiro de la noche que valió una réplica. El dato es interesante, por dos cosas: a) las réplicas en este formato de Batalla de Gallos donde cada minuto de streaming cuesta dinero, están súper prohibidas. La idea es que no haya ninguna. Es una petición que se le hace amablemente a los jueces por esta cuestión. Y b) la primera réplica de la noche fue también en el tiro de octavos de Jony Beltrán. Eso nos habla de lo difícil que es Jony como rival. Y a partir de esta noche, su reputación pasó de ser respetada a convertirse en el maldito Demonio de Acuña. Que ya lo era, pero definitivamente fue uno de los gallos con mejor actitud en la noche y el apodo es justo ahora grabarlo en letras de oro en el Palacio Municipal de Acuña. El batillo estaba en la zona desde que llegó al venue, total concentración. Y se notó en su destacada participación que le valió el amor incondicional de toda la raza mexa que lo estaba viendo en el stream; además del respeto de mucha gente en todos lados.

Sobre su participación en la final, Jony dijo:  "La final fue buena, hubo muy buenas batallas. Me sentí bien de llegar a la semifinal ya que eran muchos participantes, llegar hasta ahí fue difícil, pero me sentí muy bien. Mi técnica para llegar tan lejos fue no bajar la guardia. El público fue muy apasionado y eso me agrado. De la final de Argentina en 2013 a esta, me sentí más experimentado. Ahora que viene la final mundial 2017 en México hay que defender al país a todo lo que da".

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Los jueces dando el falló a Jony. Foto: Fabio Piva

Continuaron los cuartos y Arkano le ganó a Gasper y luego Skone a Papo en el tiro más dramático de la noche. Empezó muy bien Papo, con su primer round como uno de los mejores de la noche, pero en el segundo se le fue la voz por completo y perdió toda concentración. Skone aprovechó a la perfección la oportunidad y demostró ser un rival implacable. Fue un tiro de huevos.

Finalmente en semifinal, el local Jota le ganó a Jony Bel y Skone le ganó a su compatriota Arkano, quien era el otro favorito definitivo de la noche, lo que le abrió a Skone amplia ventaja para ganar el tiro final, cosa que hizo al enfrentarse a Jota. El tiro por el tercero y cuarto lugar lo ganó Arkano contra Jony Bel y en la final ganó Skone contra el local Jota.

Foto: Fabio Piva

El tiro final fue realmente interesante y la fuerza mental que demostró Skone no puede más que volverse legendaria con el tiempo. Lo que hizo en ese tiro final fue increíble: decirle a los jueces en su cara cuáles habían sido sus errores, y obligarlos a ceder ante lo evidente: que la localía había tenido un peso excesivo y que si le daban el triunfo a Jota quedarían como unos tontos ante miles de personas fuera de Perú. Hay que recordar que Skone es un gallo que lleva muchos años de intentar ganar esta competencia, y finalmente lo logró. Se entregó a la energía del momento de un modo bellísimo y se conectó con su intención como monje meditando en el Tíbet. Fue una demostración de fortaleza pocas veces vista y sólo posible llevarla a cabo por un atleta de alto rendimiento. Al respecto de su triunfo, Skone dijo: "Quiero agradecer a mi gente, a esos que nunca dejaron de confiar en mí. Llevo muchos años luchando, y creo que al final esto es un gran logro porque nunca deje de intentarlo. Reconozco que fue muy complicado rapear con el público en contra, cuando te están haciendo silencio todo el tiempo es muy difícil, pero al final me repuse de eso y pensé que lo único que tenía que hacer era rapear, ganarle a mi rival y confiar en la decisión de los jueces".

Al final del día, está chingón que haya ganado Skone. Es un rifado el bato y la tenía merecida. Y claro, se anunció que la final internacional de Batalla de Gallos en 2017 será México por segunda ocasión en la historia del certamen. En 2008 se llevó a cabo en el museo Anahuacali y ganó el local Hadrián, quien en esta ocasión fue uno de los cinco jueces. La banda acá en México está bastante emocionada de que regrese Batalla de Gallos a México a la geografía nacional y esto asegura que el proceso de eliminación será más grande y tal vez con más etapas que en esta y otras ocasiones. Recordemos que solamente en esa ocasión en 2008 se llevaron a cabo más fechas de eliminatoria que solo una final nacional. Y recordemos también que eso generó una de las más importantes derramas de rap y de construcción de escena que ha habido en la historia del género en el país. Sin duda, en 2017 no pasará algo así, porque en esas épocas el freestyle no era una especialización, como sí lo es ahora. Es decir, la gente en esa época pensaba en Gallos como una plataforma para dar a conocer su música. Y ahora, en realidad, la gente que se dedica a las batallas, muy pocas veces hace música: prefieren sólo dedicarse a las batallas como si fuera un deporte de alto rendimiento.

Foto: Enrique Castro Mendivil