Todas las fotos son de Francisco Gómez, Fara.Cualquiera con más de 30 años está en posibilidades de preguntarse ¿Qué demonios le resulta tan divertido de este festival a esas 150 000 personas que asisten todos los años? Al menos yo sí me lo pregunto, a veces. Buscando esa respuesta, he encontrado que en verdad sí hay muchas cosas que resultan súper divertidas y que tienen que ver con cuan joven eres y cuántos Vives Latinos has vivido. También tiene que ver con el tipo de fiesta que traigas puesta.Francisco Gómez, nuestro fotógrafo, tiene una historia de amor y odio con el Vive Latino, pero cuenta con orgullo que, en su adolescencia, fue de aquellos que se descamisaron, que quitaron un pedazo de piso para cubrirse y también tiene una anécdota de esas que empiezan con la histórica frase de: "la vez que en el Vive Latino se acabó el agua", que invariablemente se responden así: "ah, sí, el muere latino". Es todo un veterano de guerra y siempre ha estado en donde hay que estar.Este año, Francisco cazó, como fotógrafo de la Spin en los noventa, los momentos de máxima diversión y bravura del Vive Latino. Estas son fotos del slam que se armó Interpuesto y la brincadera frenética durante el toquín de Compass.
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