Una tarde de grabación en Toy Factory y Panoram Studios con Fat Tony, AJ Dávila e Ill Faded

todas las fotos por Marcelo Quiñones

Fat Tony es un rapero de Houston, Texas que ha generado una relación cada vez más relevante para su carrera con la Ciudad de México. Esta es su cuarta ocasión en la capital del país, con pretexto inicial de su participación en la sexta edición de Festival Marvin. Pero después de casi dos semanas, ha hecho un mar de actividades, y sobre todo se ha puesto en contacto con músicos de todos los géneros. Y todos han sido la mar de chidos con él y su acompañante en esta ocasión, otro texano MC y beatmaker, también de Houston, pero de otro lado de la ciudad, el señor Ill Faded (quien también ha visitado DF en otras ocasiones). Han tenido días llenos de entrevistas, tocadas, dj sets, visitas a lugares de interés, colaborando con algunos artistas y, por supuesto, haciendo lo que mejor saben: ir al estudio.

La idea de acompañarlos a una sesión surgió el lunes pasado en una de las mesas de madera que visten la azotea de Vice México, ese espacio de recreación y convivencia informal propio del godinazgo ilustrado. Vinieron de visita los texanos y al calor de un Marley, concluimos que más divertido que hacer otra entrevista, sería colarnos a una sesión de grabación y documentarla. Pocos lugares tan agradables como el estudio al que fuimos con Fat Tony e Ill Faded.

En este mundo de capitalismo global e hipermaterialismo poco ilustrado, lo único más bonito y agradable que un estudio de grabación bonito y agradable, es otro estudio de grabación más bonito y agradable. Y Panoram Studios, una casa gigante de tres pisos en la Colonia Condesa, adaptada como un enorme estudio de grabación con cabinas, salas de post y lo demás que requiere una empresa de este tipo, fue pensado y construido por integrantes de Zoe, y es ese lugar del mundo en el que quieres estar cuando los jinetes del apocalipsis lleguen a cobrar la cuenta. Sin una sola esquina disonante, Panoram tiene un gusto increíble. Y en la planta baja, otro espacio de grabación, más pequeño pero igual de maravilloso, acompaña el proyecto: Toy Factory, surgido de la mente de José Miguel Salinas, vocalista de Dapuntobeat; un cuarto groovy y coqueto, con juguetes musicales metafóricos y literales y lo necesario para grabar en una atmósfera íntima y pacheca. Como dicta la norma. Pero más chido.

La sesión comenzó en Toy Factory. Los dos texanos estuvieron grabando una canción nueva, con un beat que hizo Ill Faded en el avión de venida a México. La idea era hacer una canción nueva de Fat Tony con el beat, como una especie de símbolo de su paso por la ciudad. Y el experimento resultó mucho mejor de lo que pensaban, con la colaboración de José Miguel, una vez acomodados en su confortable fábrica, hecha con sencillez, lúdicamente: comenzó a grabar un sonido como de órgano con un mini pedal. El sonido le dio a la rola un realce de energía pum pum arriba despierten todos, que seguro habrá de darle horas de diversión editando a Ill Faded de regreso en Houston. Fat Tony dobló el coro cuatro veces y puso las dos estrofas. Al final volvió a intervenir el anfitrión, y se metió a la cabina con una kalimba, a jugar y darle un color increíble a la rola. Las vocales de Tony terminaron sonando como una línea de conga del futuro.

La segunda parte de la sesión fue en Panoram formalmente, que está en el último piso de la casa, y es como de película de Wes Anderson. Con todo y libros, techos altos, muebles viejos. En esta segunda parte, atestiguamos parte de la grabación del nuevo disco de estudio de AJ Dávila. La vibra era de alegría, y la dosis correcta de euforia. AJ quería que Tony grabara un coro. Terminó siendo un hook al final de la canción, con ambos doblando la letra, así que por turnos entraban y salían de la espaciosa cabina, intentando intenciones en el micrófono, ensayando la parte, escuchándose en los audífonos. El aire de libertad y sencillez, poco a poco fue dando forma a la colabo. El tema son dos minutos de happy punk con una instrumental que recordaba a ratos el tema de entrada de Friends, y no sé si eso sea bueno o malo, pero en el momento se sentía más como un hallazgo que un desatino. En todo caso, el combo entre ambos es ganador y queremos escuchar la rola.

Unos toquecitos, la chelita de rigor, tarde soleada y todos pilas haciendo lo suyo. Pasamos un buen rato entre risas y un amplio margen de error y diversión, pero haciendo lo que se debe, sin miedo ni pena, proponiendo musicalmente, como debe de yes. Esperamos poder escuchar ambos tracks en algún momento del año. Y que sigan rifando Toy Factory y Panoram Studios.