Sunset Images: Encontrando nuevos inicios

Sunset Images. Fotos tomadas del Facebook de la banda.

Hablar de la música poco comercial de nuestro país eventualmente lleva a discutir cómo nadie la apoya ni le da chance de crecer. Hay muchos intereses en artistas internacionales, pero ¿y los de aquí? Son conversaciones típicas que tenemos. Sin ánimos de menospreciar ciertas áreas de carencia en esto de la música, ¿cuantas personas o artistas se han aventurado fuera de los límites seguros de los antros y espacios predestinados a tocar y existir para ver qué hay allá afuera? ¿Cuántos se han expuesto a lo que se puede lograr con un poco de esfuerzo?

Sunset Images, en su corta carrera, se han caracterizado por no esperar a que alguien les diga a dónde ir ni dónde tocar. Desde el lanzamiento de su primer EP homónimo, han desafiado las fronteras del DF para tocar en varias ciudades del interior de nuestro país, además de haber girado en Texas y tenido dos visitas a Nueva York —la última durando seis meses con un montón de presentaciones en lugares chicos y medianos con varias bandas locales. Esta residencia la lograron sin apoyos o auspicios de nadie en particular; simplemente ahorraron y se lanzaron a la aventura.

No es que esto les haya sido fácil. En el proceso de desarrollarse como banda pasaron de ser un cuarteto a un trío, y a la actual formación de dúo conformado por Samuel Osorio (guitarra y bajo —sí, toca ambos en vivo) y Alejandro Zúñiga (batería y secuencias). Así mismo, su estilo musical ha cambiado de ser post rock instrumental, con todos los sellos característicos del género, a música instrumental más precisa y al punto, logrando algo muy original. Esto se plasma perfectamente en su más reciente EP llamado Hajime (que significa algo así como “inicio” en japonés), una colección de temas bastante únicos.

Después de su aventura, nos encontramos con Samuel y Ale para que nos platicaran de su experiencia, su música y los sacrificios que conllevan.

¿Cómo va su readaptación a la vida mexicana?
Samuel Osorio: Todavía como que no me adapto. Todavía extraño allá… pero queremos tocar.

Alejandro Zuñiga: Sólo hemos tocado una vez desde que regresamos.

¿Cómo es que pasa de ser una banda con más miembros a sólo dos, y de su primer EP a Hajime?
Alejandro: A mi me invitó el baterista que tenían antes. Ya iban al estudio cuando entré. De hecho, llegué, me aprendí las canciones y como al mes grabamos. Al principio éramos cuatro… sonábamos chido.

Era más como el post rock clásico, ¿no?
Samuel: Sí, teníamos más cambios, las canciones eran más largas. Tratábamos de meter otros elementos para que nos distinguiéramos de las demás bandas, como tiempos raros o sonidos raros.

¿Comenzaron más o menos en la época que se formaron colectivos como Colapso Post Rock y bandas parecidas?
Samuel: De hecho, ellos nos invitaron a un festival que eran puras bandas instrumentales. En el Arena Royal Club [extinto bar de la Colonia San Rafael, donde se hicieron muchos shows de colectivos como Aquí No Hubo Escena]. Tocaron K, A Shelter In The Desert, Fake Designers, muchas bandas más.

Luego se salió el guitarrista y nos quedamos tres, que fue [en la época de] la primera vez que nos fuimos a Nueva York.

Alejandro: Ahí ya el sonido estaba tomando otra dirección. Ya estábamos escribiendo cosas más intensas. Porque antes las canciones comenzaban suave, subían, tronaban en algún momento. Luego escribimos canciones que reventaban desde que empezaban.

Samuel: Cada que se sale un integrante, se pierde lo que este integrante aporta.

Alejandro: El proceso para Hajime fue súper chido. Se fue dando solito.

Samuel: Todavía estaba el bajista y creo que un día no pudo venir a un ensayo y le dimos los dos solos, a ver qué salía.

¿El bajista se salió porque decidieron ir a Nueva York?
Alejandro: Fue desde que nos fuimos a una gira por Texas. Fuimos hace como un año a Austin. Como banda estuvimos muy unidos, pero como personas no tanto. Llevábamos ingeniero de audio y nuestro manager. Tocamos en Monterrey, en el Nodriza, luego despertamos y cruzamos la frontera.

¿Cómo armaron esa gira?
Samuel: La hicimos nosotros, llamamos a lugares y bandas para que se armaran los toquines. Fueron tres fechas en Austin, una en San Antonio, la de Monterrey y una en Houston… ahh, y antes nos fuimos a Puebla… también a Toluca. En estas dos fechas tocamos con The Polar Dream.

¿Tocar fuera fue algo que discutieron desde el principio?
Samuel: Estaba la idea, pero la verdad la veía más lejana. Todo fue armándose súper rápido. La primera vez que fuimos a Nueva York fue porque Ale se iba a ir solo y nos fuimos de colados [ríe]. De hecho, el bajista no tenía Visa y se la dieron pocos días antes de irnos, estuvo bien cardiaco.

Ale, ¿originalmente te ibas a ir a dar el rol nada más?
Alejandro: Sí. Me gusta viajar. Digo, no lo he hecho mucho, pero me gusta conocer. Creo que con la música lo puedes llevar. Fue después de echar unas chelas que lo decidimos. Nos fijamos la meta, planeamos y ahorramos. Y no es que seamos malinchistas y no nos guste tocar en México, pero nos gustaría conocer qué es lo que sucede en otras escenas de donde salen muchas bandas, como en Austin… también una vez tocamos en una feria de pueblo. ¿Cómo se llamaba?

Samuel: [Piensa unos momentos] Fue en Hidalgo.

Alejandro: Tal cual la feria. Tocamos frente a un kiosko.

Samuel: Fue la primera vez que tocamos los dos solos.

Alejandro: Fue la primera vez que tocamos el Hajime. Como usamos loops, nos dimos cuenta de muchos de los errores y es complicado amarrarse. Nosotros montamos todo y el audio que tenían era de un sonidero. Estuvo bien chido.

¿Que tal los recibió el público de la feria?
Samuel: ¡Se prendieron! La neta sí.

¿Por qué regresar a Nueva York?
Alejandro: La primera vez que fuimos, tocamos en el Baby’s All Right.

Samuel: Recuerdo que terminamos de tocar y Ale me dijo, “oye, no manches, deberíamos de venirnos acá un año o algo así a vivir”. Así fue como fue desarrollándose la idea. Nos pusimos la meta de irnos en un año.

Y entre una cosa y otra grabaron Hajime…
Alejandro: De hecho, la presentación la hicimos allá, en un lugar llamado Muchmore’s. Ese evento salió de nosotros, contactamos al lugar, invitamos a las bandas. Le cayó gente…

Samuel: Hasta salió varo.

Ale y Samuel afuera del Muchmore's, donde presentaron Hajime.

¿Fueron bandas que conocieron la primera vez que se fueron?
Alejandro: Una de ellas. Las demás las conocimos la segunda vez.

Armaron los cassettes allá también, ¿verdad?
Samuel: Es una historia chida, porque en la casa en la que nos quedamos cuando estuvimos por allá era de una señora como de 60 años, y tenía un sótano lleno de cosas como las que vas juntando en la vida. Entonces un día encontramos una caja de cassettes…

Alejandro: Ella era una profesora y daba muchos discursos, debates y pláticas. Las cintas estaban olvidadas, entonces tomamos algunas para tener mercancía que vender. Grabamos el disco en México [en los Estudios Testa de León, Guanajuato].

Estar lejos debió ser difícil.
Alejandro: Dejamos una vida. Dejé una relación sentimental, una relación laboral, otra banda en la que tocaba [Acidandali]. Para mí fue olvidarme de todo. Fue un proceso de haber vivido mi vida de una manera y decir “creo que quiero otra cosa, quiero darle un giro.” No sólo digo por ir a una ciudad, porque íbamos a estar solos. Yo no había pasado tanto tiempo fuera de México. Dejar a toda tu familia…

Samuel: Estuvo chido porque nos conocimos más, nos unimos más. Vivir seis meses con alguien es pesado. Ver la misma cara todos los días. Pero nos llevamos chido, se dio bien.

Alejandro: Hicimos un muy buen equipo. Y aquí estamos. Sucede mucho que muchas bandas cuando acaban sus giras ya no se ven.

¿Qué tal fue tocar en NY con otras bandas y su música allá?
Samuel: Tuvimos muy buena recepción. La gente se nos acercaba después de los toquines y se sorprendían que éramos de México. Creo que mucha gente no esperaba que tocáramos este tipo de música. Hubo una ocasión que un ingeniero de audio se empezó a portar mamón desde que llegamos. Al final se nos acercó y nos dijo que no esperaba que sonáramos tan bien y que lo tuviéramos todo tan bien armado.

Alejandro: Hasta nos pasó el contacto de un lugar dónde tocar.

Algo como lo que estamos haciendo no está sonando en Nueva York. No están tan acostumbrados a escuchar este tipo de bandas. Vimos muchas bandas experimentales, pero como hay tantas, creo que la tendencia es a hacer las cosas un poco más digeribles. También nos dimos cuenta que nuestra historia no es la única: muchos otros músicos se van a Nueva York, ya sea como banda o se forman por allá. También nos encontramos con mucho apoyo entre bandas, nos compraban mercancía y hasta nos invitaron a un festival, Slackfest.

Ya están componiendo nuevas canciones para lo que será su siguiente material, pero ¿cuáles son sus planes para el futuro?
Samuel: Ya tenemos seis canciones grabadas, estamos esperando la mezcla y la masterización, pero seguimos componiendo y puede que regresemos al estudio a grabar más. Tal vez saquemos un disco más largo.

Alejandro: Tratamos de fusionar las dos etapas. Lo que trabajamos allá y lo que estuvimos haciendo aquí. Antes de tocar a lo bravo, queremos demostrar todo lo que hemos aprendido, y estructurarlo en un show de media hora que combine las facetas que ha tenido la banda, tanto visual como en lo sonoro. Queremos hacer un show que podamos presentar en México y en otros lados.

Samuel: Queremos llegar a la siguiente etapa. Hasta ahora, todo lo que hemos hecho como Sunset ha sido de nosotros. Nadie nos ha tirado el paro. No teníamos contactos en Nueva York ni en Austin. Luego nos piden que les pasemos el contacto, pero en verdad no hay un contacto, no hay un chido. Ahora queremos acercarnos a una agencia de booking y hacer algo más grande, que vaya respaldado por un equipo.

Y para los que quieren hacer algo como ustedes, ¿qué les aconsejan?
Samuel: Nosotros nos clavamos en la computadora a ver lo que está pasando en otros lados. A veces contactábamos bandas que no nos respondían, pero también hay muchas bandas que son súper chidas.

Alejandro: También es importante investigar los lugares que hay, los foros, si hay colectivos, acercarse a ellos, y armar un buen press kit.

Marcos Hassan también tiene una banda. Síguelo en Twitter - @KiddieRiot