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Música

Una propuesta de hip hop instrumental desde la Baja Sur: Clávate en "Xplicit" de No Pitch Control

Ojos rojos, francmasonería, la bandera gringa, tags, un tablero de ajedrez y un beat hipnótico. Todo eso y más en este banger subterráneo.

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La idea de hacer música instrumental a partir de sampleos tuvo su pináculo a fines de los años noventa cuando la oferta de electrónica reinaba suprema en el mercado de discos compactos. El trip hop de Bristol, DJ Shadow, las compilaciones de Hed Kandi y el chill out y, por supuesto, el regreso del DJ en el hip hop y el movimiento del scratch y el tornamesismo, hicieron de esta época uno de esos raros momentos donde el flujo de música popular se alejó de la pista de baile para permitir un amplio respiro de escuchar sentados y en silencio propuestas musicales que requieren concentración profunda.

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El hip hop instrumental y los subgéneros aledaños, se relegaron después a la más estricta definción del nicho y se han mantenido en ese limbo durante más de una década. Se asoma a veces en la corriente principal, a algunos artistas se les concede hacer música sin coros ni grandes estrellas, y en el caso del hip hop y la electrónica, que tampoco sean bailables, pero son la excepción que confirma la regla. Tal vez el regreso de The Avalanches es uno de los ejemplos más claros, además de ser el más cercano en el tiempo.

En ese contexto, la propuesta del colectivo de dj's conocido como No Pitch Control y de algún u otro modo lidereados por Dj Phat, resulta arriesgada y sui generis. Pocas veces se apuesta en el hip hop en español por música instrumental, donde el único otro protagonista, además de la producción, sea el scratch. Y estos homies rifaron al hacerlo. No Pitch Control comenzó en la Baja Sur, pero actualmente cuenta con integrantes en otros Estados del país.

La canción se llama "Xplicit". La música naturalmente es de No Pitch y el video es de Mushroom Films. El producto final abreva tanto del sonido como de la imagen, haciendo de "Xplicit" una increíble simbiosis entre ambas. Si es raro hacer música de este tipo, más raro aún es invertirle a la propuesta, generar un concepto y producir un video, como es el caso de "Xplicit".

Así que ponle play abajo al alucín, de preferencia después de fumar unos piporrazos, y apoya al hip hop instrumental hecho en México.