Doce cosas horribles de la película 'Noé'

Fui a un colegio católico nueve años y medio de mi vida y asistí como monaguillo durante cuatro años, así que sé una que otra cosa sobre el gran libro de cuentos conocido como la Biblia. Y al igual que los fans de El Señor de los Anillos, X-Men y otras obras clásicas de fantasía, estuve un poco preocupado cuando escuché acerca de la adaptación hollywoodense de la historia de Noé. Como cualquier otra adaptación hay un millón de maneras de cagarla. Pero mis dudas se terminaron en el momento que me enteré que Darren Aronofsky sería el director a cargo. En los últimos 18 meses de que mi libro, Skinema, fue elegido para ser un guión de televisión, me hice amigo de Darren a través de mi productora/su prometida, Brandi Milbradt. Fueron muy lindos en invitarme a mí y mi esposa al estreno en Nueva York de Noé. Como amigo, me imaginé que debería de ayudar a Darren con un poco de publicidad (ya que nadie más está hablando sobre la película) con un punto de vista honesto. Ser amigo verdadero de alguien significa decir la verdad aunque duela. Dicho lo cual, siento que es mi deber decirle a Darren la verdad sobre su película. Así que en honor a los 12 mandamientos, aquí las 12 cosas que salieron mal en Noé.

1. El error más grande y estúpido en la película es que nunca muestra cuando la ballena se traga a Noé. Odio cuando películas como El Hobbit y Noé alargan cuentos cortos y las convierten en películas con secuelas. Entonces qué, ¿no veré a la ballena comiéndose a Noé hasta la tercera parte de la película? ¿Qué chingados? Me sentí muy pendejo, yo estaba ahí sentado con mi camiseta de “TE AMO, SHAMU” esperando ese gran momento… Y nunca sucedió. 2. A los cinco minutos que inició la película me pregunté por qué Hannibal Lecter tenía cabello largo, cómo puede ser que vivía durante esa época. Estuve muy confundido.

3. Para ser una película basada en el Génesis, se me hizo muy extraño que no aprovecharan la oportunidad y musicalizaran la película con música de Génesis o Phil Collins.

4. No era un musical. Si la película de El Hobbit nos enseñó algo fue que todas las películas deberían de iniciar con un cover de Led Zepellin de 30 minutos. 5. Llegué tarde al estreno, entonces me perdí la parte donde dicen en qué ciudad están, pero con tanta lluvia me imaginé que era Seattle. Y regreso a mi punto de musicalización, si la película fue grabada en Seattle, ¿por qué no usaron música de Nirvana?

6. Noé dura poco más de dos horas. En mi opinión la película debió tener más música y cantos, (pero como mencioné anteriormente, no los hubo). 7. No hay escenas de desnudos de Russel Crowe ni Jennifer Connelly. (Pero sí podemos ver los hombros descubiertos de Hermione Granger, eso vale la pena). 8. Fue muy triste que por alguna extraña razón el rol de Dios no haya sido protagonizado por George Burns. Estoy seguro que fue un problema de presupuesto. Nunca vemos ni escuchamos a Dios. Yo hubiera elegido la voz de James Earl Jones para el personaje de Dios, algo así como Darth Vader hablando desde el más allá. 9. No hay negros en la película. No sé si la historia de Noé y la ballena es antes o después de Jesucristo pero sí estoy seguro que Jesús era negro. Debería de haber la participación de un negro. Si fuera mi película, el reparto entero hubiera sido puro negro. Perdón, Russel Crowe. Te la rifaste pero yo creo que Jerrod Carmichael hubiera sido un mejor Noé que tú. 10. A pesar de que hay buenas referencias de cultura pop, siento que eran inadecuadas. La religión no es burla.

11. Perdón por arruinarles el final pero en la última escena de la película vemos a Noé comiendo uvas. No eran moras, eran uvas. 12. Por último, la paloma blanca que aparece como muestra que había terminado el diluvio no fue de mi agrado. Yo hubiera elegido a un animal más cabrón, no sé, quizá un pterodáctilo que disparara lásers con los ojos y comiera recién nacidos y peleara contra Godzilla.