Fakuta: canciones nostálgicas que arrasan como una tormenta solar

Pronta a terminar de mezclar su segundo y nuevo disco, Tormenta Solar, fichado por el sello Quemasucabeza, Pamela Sepúlveda (a.k.a_ Fakuta), lanza su nuevo video clip. Realizado por el cineasta Bernardo Quesney y filmado en un hospital público de Santiago de Chile, esta mezcla ganadora te hará mover la patita y, al mismo tiempo, pensar un par de cosas._

Pamela comenzó su carrera con una flauta dulce en talleres de colegio tocando éxitos de la radio noventera. Pronto participaría del folk grunge de la banda Mary Celeste, donde compartiría salas de ensayo con Martín Pescador. Luego formó la banda experimental Golden Baba compuesta exclusivamente por mujeres y que incluía instrumentos como trompeta, zampoña, cuerno francés y clarinete. Simultáneamente participó en la "world music", un antídoto ante la rigidez musical de la época y que la conectó con astros del under como Dadalú y Nawito, con quien formó El Banco Mundial.

Fakuta está pronta a lanzar su segundo disco de la mano de Milton Mahan de Dënver y Pablo Muñoz, otra mezcla ganadora que conforma De Janeiros y los artesanos de esta joya melódica del electro pop andino.

¿Cómo te ayudaron tus proyectos anteriores a llegar al proyecto Fakuta?

Partí por recomendación de la Dadalú, que es mi amiga. En ese momento todos mis amigos ya tenían un proyecto electrónico solista, proyectos de dormitorio. Me decían: "inténtalo, algo entretenido va a salir". Y lo intenté.

Lo primero que salió fueron las canciones, algo que no me esperaba porque lo hice sólo por diversión. De hecho, pensaba hacer algunas experimentaciones vocales, pero al final sólo creaba canciones y dije: ‘bueno… si sale eso, dije, voy a hacer eso’. Escuché mucha música de los inicios de la electr&oacuoacute;nica, música contemporánea y docta, investigué sobre cómo rescataban sonidos, los sampleaban y procesaban. Así que me formé en el computador, trabajando bien autista, siendo autodidacta y proleta, porque esa es mi perspectiva real. Mi formación, en ese sentido, es periférica y al pop nunca lo anduve buscando. Me decidí a hacerlo en el último año de universidad, cuando estaba terminando mi título de Arquitecta. Subí mis canciones al Myspace y la gente de verdad estaba sorprendida.

No sé. La Javiera Mena o el Milton me decían que tenía buenas canciones, me decían que lo hiciera en serio. Pero en ese momento, en el año 2008 o 2009, hacer algo en serio sólo significaba tocar en vivo. A la gente le fue gustando porque era llamativo tener un trío de coristas súper motivadas a lo The Supremes, que se llamaron The Laura Palmers (Anita Gallardo, Danae Morales y Felicia Morales). No sé, yo siempre he estado detrás de ideas, si no estuvieran esas ideas no haría esto ni cagando y si a la gente le gusta entonces es como una confirmación para seguir dándole.

¿Te enfrentaste a algún prejuicio al realizar música pop?

A mis propios prejuicios (risas). En algún momento hubo una explosión pop en Chile y, en algún punto, vi bandas que eran muy de rock queriendo hacer pop, sólo por esto. Onda gente muy folk queriendo hacer electrónica. Ahora más bien hay una resistencia de parte del rock con respecto al pop. Pero yo estoy súper convertida a esto, como si fuese una religión y siento que es lo que hago bien. El pop puede ser algo serio: los grandes himnos de la música son música pop. Y es muy potente hacer pop porque tienes que llegar a lo tribal para contagiar a otro.

O sea, a pesar de que creas sola en tu pieza, con tu computador, generas música para masas…

Sí, eso me gustaría. No sé si lo he logrado pero me gustaría llegar a esa conexión. He sido muy discriminada por mis propios amigos porque mi colección de discos es, según ellos, música ñoña, porque está Abba y Electric Light Orchestra. Es como ñoño porque es música que tiene drama y no es un sonido cool que está solo en un estado de ánimo todo el tiempo. Siempre prefiero el drama, por eso en este disco van escuchar mucho Michael Jackson y Pet Shop Boys. En este disco me propuse ocupar los altos estándares que la música pop que nos han entregado universalmente. Y esos estándares básicamente son Michael Jackson y su disco Thriller, que tiene como seis singles y permite que la gente se ponga feliz y quiera bailar… causa las sensaciones que la gente espera y necesita.

Las canciones de tu disco anterior tenían un tono de nostalgia, algo suave y dulce. ¿Algo de eso se mantiene en este disco nuevo?

Es que igual yo soy súper nostálgica para componer. Que haga una canción que sea bailable no significa que sean totalmente felices o positivas. Quizá soy muy adicta a sentir cosas y de repente me da rabia que el mundo adulto, sobre todo, quiera controlar y medir esas emociones. Lo he sentido así, por eso ¿por qué no puedo ser simplemente una tormenta solar, explotar y quemar todo cuando yo quiera? Soy así, ultrasensible. El mundo adulto necesita personas que no sientan tanto. Para las mujeres eso también es complicado, porque en definitiva te exigen que seas más hombre, más racional, más duro. Por eso quizá me aferro tanto a la nostalgia, entre otras emociones, porque hay varias historias a las que uno vuelve, yagas que uno tiene y que sirven para crear. De hecho también está esa canción, "Juntapena", que se trata un poco de eso, de que vas viviendo y juntas todas tus penas, las usas y te ayudan a sobrevivir.

En este disco volví a trabajar con los De Janeiros. Les tengo mucha confianza, hay canciones que no me daba la gana de mostrárselas a nadie, solo a ellos. De hecho nadie ha escuchado nada de este disco, onda solo mi novio y quienes participaron en el video. El disco supuso harto esfuerzo, porque fue como tomar una decisión importante en mi vida: decir no voy a trabajar más de arquitecta y voy a dedicarme a la música. Y di el paso y ha resultado bien dentro de todo. Igual hay cosas, como una que otra deuda, pero ahora está todo esto del profesionalismo, de ponerse unos plazos para hacer las canciones, para grabar el disco, que es heavy porque los chiquillos tampoco están acostumbrados a trabajar con plazos.

¿Cómo conjugas la música con la arquitectura?

Tiene mucho que ver con el cómo veo la composición musical, porque la arquitectura es mi escuela. Entonces sé de estructura y las composiciones que hago son complejas porque tengo esta mentalidad de saber conectar cosas, ideas, conceptos… Se aplica sobre todo a la composición. Para mí es como si cada canción fuese una edificación. Igual hay cosas que se repiten en mi disco de ahora. En el anterior estaba mucho más fijada en que la estructura se desarmara, en reconstruirla. Pero ahora estoy más interesada en hacer "classic pop music".

¿Te sientes parte de alguna escena pop chilena?

Yo me siento parte del año 2007, cuando tocábamos en el Taller Sol con la Dadalú, de repente tocaba Gepe. No sé, cuando todos éramos desconocidos… como cuando los Dënver recién llegaron a Santiago y tocaban con Fruity Loops los mismos temas grandiosos de ahora pero en una versión computacional muy pobre. Eso era bacano. La recuerdo con mucho cariño porque era una época en que nadie tenía grandes expectativas, era sólo amor a la música.

¿Tiene un rol social la música pop?

Sí, yo creo que es la responsabilidad máxima. Porque el pop es lo que más se escucha, es masivo. Va dirigido a todos la puedan conocer. Igual tuve un proceso de rollos antes de hacer el disco. Pensé: es mi segundo disco y tengo muchas opciones, una es seguir en esta onda más piola y alternativa, hacer música experimental y la otra opción es tomar el lado pop que tengo y potenciarlo, haciendo canciones que le pueden gustar a mucha gente. Igual suena a venderse, obvio. Pero tampoco es que a mucha gente esto le importe (risas).

Me he dado cuenta que al hacer música que le guste a mucha gente estoy finamente haciendo algo generoso, no mirándome al ombligo y cantando mi sentimiento artístico. Ahora la cosa es asumir la posición de que hay alguien que te va a escuchar, entonces si le vas a decir algo, mejor dile algo bueno. Para mí no se trata de hacer una canción que diga cien mil verdades, ser como Portavoz, porque tampoco me interesa tomar la posición de un profeta que no soy. Para mí lo único que se puede hacer es ser lo más auténtico posible al decir cosas.

El pop hace que muchas mujeres la estén llevando, me encanta eso. No sé, está la Francisca Valenzuela, la Javiera Mena, Marineros… y la Dadalú, desde su reinado under. Me acuerdo cuando era la época del rock chileno y solo era ver a los Chancho en Piedra… eso me genera un montón de imágenes horribles, porque los hombres son muy feos en realidad. Desde una perspectiva estética pensar en escenas solo compuestas por hombres es fea: la despreocupación de qué ponerse en el escenario, de los peinados y un montón de cosa que afectan el ámbito visual (risas).

Dadalú, en una entrevista, me decía que ella estaba cansada que las mujeres del pop tuvieran que apelar a motivos extra musicales para ser valoradas…

Bueno, siempre tenemos esa discusión con la Dada y yo soy de las personas que no quiere creer en eso un poco, pero no puedo cegarme, es obvio que ocurre. Pero a mí nadie me ha dicho baja de peso (risas), en mi sello nadie me diría eso, además ninguno es muy bonito. Pero no sé, Gepe de repente se motivó, bajó de peso y ahora es más famoso que nunca. O la Mena que nunca fue tan flaquita y ahora es como regia. El pop igual requiere que te arregles, pero otra cosa es que nos pusiéramos todas medio Nicky Minaj y entráramos a destaparnos en competencia de quién muestra más. A lo más está la Denisse Rosenthal que muestra un poquito, porque igual es súper regia, así que puede. Ahora recuerdo algunas experiencias que me dan rabia. Posts de mujeres diciendo “ay me imaginaba que era diferente por su voz” ¿qué onda? ¿Se imaginaban que no era morena? ¿Que tenía la piel más clara?

¿Cómo llega Bernardo Quesney a dirigir el video de "Tormenta Solar”?

Igual llegué al Bernardo porque es amigo del Milton. Habíamos estado en unos carretes antes, nunca habíamos hablado, pero me caía bien, echábamos la talla. Él es muy amable, onda me había escrito algunas veces pidiéndome entrar a una tocata y yo le decía “ya, sí, obvio” y más o menos me decía “te dirijo un video si me dejas’ entrar” (risas), pero es que con él nada es en serio… y yo como que nunca veía venir esa oportunidad, hasta ahora que pasó. En algún momento quise hacer un remake de El Exorcista. Me puse a buscar y vi un video fan que hizo para los Ases Falsos con imágenes de esa película. Y eso para mí fue como una señal: le escribí y así salió, todo por amor al arte.

La canción sería es una referencia a Carrie. ¿Qué significa esa película para ti?

Me encanta el personaje de Carrie porque es alguien autista, que le hacen bullying, que está muy para adentro y de repente tiene el súper poder escondido, entonces lo quema todo, porque todos se lo merecen. Me ha tocado vivir un montón de dramas asquerosos con gente que es muy religiosa y que reprime a sus hijos. Y esto no puede seguir pasando y en la película es tan claro. También tiene que ver con la represión de la mujer en la sociedad, por ejemplo, en las pegas me ha tocado sentir que no puedes andar desarreglada y sin maquillaje porque tú eres mujer. Tampoco puedes hablar fuerte y no puedes ser mandona, porque si no eres una bitch. Los hombres claro, pueden hablar fuerte y tener ideas claras porque eso los hace bacanes, pero las mujeres inmediatamente pasan a ser bitches. La represión tiene que ver con que no puedes pasarte de lista jamás, como tampoco puedes saber más que un hombre, porque al tiro te tiran para un lado. Por eso la solución es una tormenta solar para quemarlo todo y a todos. Bueno… ahora me van a vincular con el caso bombas y ahí quedamos con el disco (risas).

En ese sentido, ¿qué es para Fakuta una tormenta solar y con qué arrasa?

Uy, qué difícil responderlo. Para mí lo que más me hace sentido es la explosión interior. Porque cada vez que me pasa y exploto, siempre pero siempre hay alguien ahí para decirme “¡¿Pero por qué?!”. Y de eso es como ya basta. ¡Hasta cuando esta sociedad va a dejar de llamar histéricas a las mujeres! O bien que dejen a las histéricas vivir su cuestión en libertad. Venía pensando en eso… una vez vi a unos amigos agarrarse a combos y fue la experiencia más horrible de mi vida, ver la violencia animal de mis amigos por una razón muy absurda. Ni siquiera tenían alcohol encima y después de eso todo bien, se les pasó. Es decir, esa violencia está aceptada, pero que una grite o hable más fuerte no. ¿Cuándo va a ser diferente? La tormenta solar tiene que arrasar con eso y también con toda la gente religiosa, así como con la gente que piensa desde el poder.

Oye y si existiesen esas monjas post-Apocalipsis ¿cómo serían?

Yo creo que tendrían ropa de látex y usarían colores neones, además de esas máscaras antigases porque el aire que va a estar para la cagada.

Y a quienes le orarían esas monjas?

A Michael Jackson, sin duda.

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@andreiii