Tourista: Pop electrónico y viajes psicodélicos desde Perú

Foto: Daniela Sánchez

En la última década, la escena musical alternativa peruana ha logrado nuevas dimensiones. Artistas como Dengue Dengue Dengue!, Las Amigas de Nadie, Kanaku y El Tigre, Animal Chuki y Cristina Valentina -entre varios otros- han logrado poner los sonidos electrónicos y rockeros del país inca en los oídos del continente.

Entre esta cantidad de proyectos se encuentra Tourista, banda que nació en las templadas playas del sur de Lima en el 2011 y cuyo nombre es una mezcla entre las palabras “turista” y “tour”, una oda al amor por el movimiento y la necesidad de conocer nuevos lugares. Tan solo un año después de su formación, publicaron Déficit de atención, un EP de cinco canciones impregnado de espíritu joven, ideal para pasar una tarde con amigos tomando unas cervezas y con una marcada intención de ponernos a bailar descontroladamente. Este trabajo demostró que la escena alternativa estaba viva en Perú y con canciones como: “Lentes”, “Flores” y “El Camino”, los posicionó como uno de los grandes representantes de esta nueva ola en su país y los dio a conocer en otros lugares de Sudamérica.

Después vinieron los viajes, los festivales y todo el caos que conlleva hacer parte de una banda reconocida. Rui (voz y guitarra), Sandro (batería) y Genko (sintetizadores y bajo) estaban abriendo su camino en la música pero como en todo proyecto musical, hay un punto en el que urge sacar material fresco. Justamente eso fue lo que hicieron la semana pasada con el lanzamiento de Colores paganos, su primer álbum de larga duración.

Lo primero que pudimos escuchar de este trabajo fue “Select y start” y “Gato por liebre”, dos canciones con un tono acústico que viajan entre atmósferas electrónicas con un toque de psicodelia, algo un poco distinto a lo que les conocíamos, que nos mostró una faceta más introspectiva y calmada en su repertorio. Pero al escucharlo completo, temas como “Brasil” y “Un ratón” nos demostraron que todavía conservan esa intención de ponernos a bailar en sus conciertos. Es una unión entre ambas cosas y una clara muestra de que en cuatro años, la vida cambia demasiado.

El álbum fue producido y mezclado en Bogotá en los estudios de Árbol Naranja y contó con la participación de Javier Rodríguez, productor colombiano que estuvo a cargo de Doce Vientos, la última placa de Telebit. A propósito de este nuevo trabajo, hablamos con Rui para que nos explicara cuáles son las intenciones de la banda con este nuevo disco, sus pensamientos sobre la escena alternativa en Perú y el cambio de sonido que proponen en su nuevo álbum.

Colores paganos

NOISEY: Primero que todo quisiera preguntarte ¿cómo es la escena del rock y el pop alternativo en Perú?
Rui: Que chévere que me preguntes eso. Muchas veces no nos dan el espacio. Acá en Lima están pasando cosas muy interesantes y hay una energía creativa muy fuerte. De hecho es tan fuerte que cuando me preguntan cuáles son las influencias de la banda digo que casi todas son grupos contemporáneos a nosotros. Son muchos proyectos los que se están moviendo en este nuevo círculo alternativo que hay en Lima.

Entre todos estos, ¿cuales son los que más te emocionan?
Hay unas bandas que llevan un poco más de tiempo y que ya han salido al exterior, como por ejemplo Kanaku y El Tigre y Dengue Dengue Dengue! También hay otras que están empezando a fortalecerse para salir y que son muy buenas como Lalá que es una chica que hace folk acústico sacando muchos insumos peruanos, o Gala Brie que es el proyecto solista de una de las chicas de Las Amigas de Nadie, una banda que ya lleva bastante tiempo en el circuito. Otro que me gusta es el proyecto alterno de Nico Saba (Kanaku y El Tigre) que se llama Las Conchas Negras, tienen un show en vivo impresionante y es mi banda favorita de Lima. Me queda difícil mencionártelas todas pero sí te puedo decir que es un circuito muy grande y somos amigos. Estamos tratando de empujarnos entre todos para salir adelante y creo que esto es una bomba de tiempo que está por explotar, somos una escena que está en crecimiento y la gente lo está notando.

Tengo entendido que estuvieron en Bogotá para la producción de Colores paganos ¿Con qué se encontraron en nuestra ciudad?
Estuvimos con la gente de Árbol Naranja y nos presentaron a un montón de músicos de la movida bogotana. Nos dimos cuenta que pasa lo mismo que en Perú, hay una sensación de familia entre las bandas, mucho respeto y mucho compañerismo. Nos encantó eso porque nos encontramos con una movida que se está consolidando a nivel latinoamericano.

¿Cómo fue trabajar con Javier Rodríguez, que también es el productor de Telebit, una de las bandas de rock alternativo más queridas en nuestro país?
Javier fue el encargado de producir casi todas las canciones de Colores paganos y fue una experiencia increíble porque nos encontramos con un casa (Árbol Naranja) que tiene de todo. Tienen estudios, audiovisuales, salas de ensayo y fue inspirador ver como hacen las cosas con tanto corazón. Eso nos dio una nueva visión de las cosas y llegamos a Lima con ganas de hacer mucha música.

Y bueno, entrando al tema del disco ¿A qué público le apuntaron con este trabajo? Lo digo porque su primer EP suena un poco juvenil mientras que Colores paganos parece un trabajo más maduro e introspectivo.
Lo que pasa es que ese disco fue grabado hace cuatro años y es el resultado de una vivencia anterior, yo era más joven y era un momento diferente de mi vida. Este nuevo material, como tu dices, es mucho más maduro, pero ese cambio se ha dado de manera honesta. Las cosas simplemente se dieron así al momento de componer las canciones. No pensamos en ningun público en especifico, simplemente hicimos lo que nos nació y la gente que se está acercando se siente identificada con eso.

¿Como se dio ese cambio de sonido?
Yo vengo de una familia de músicos y mi papá fue el fundador de El Polen, una de las bandas más legendarias de Lima. Ellos fueron los primeros en combinar el rock psicodélico de la época con la música tradicional peruana. Crecí con esa influencia y con una buena idea de cómo se hacía esa fusión. Igualmente yo decidí seguir por otra ruta y estuve metido en el punk rock por muchos años, también hice música electrónica pero sin llegar a fusionar necesariamente con lo peruano o lo latinoamericano. Por su parte, Sandro también venía de una onda punk rock y Genko hacía música electrónica y también estudió jazz en Barcelona. La verdad es que ninguno había trabajado con música tradicional pero las influencias estaban allí, es lo que se escucha en los buses y en las fiestas, es imposible no recibirlas. Para hacer este disco pensamos que añadir estos ingredientes más folclóricos era una buena manera de conseguir una identidad propia y alejarnos un poco de la ciudad, desconectarnos del mundo para reencontrarnos con nuestras raíces.

¿No sintieron que este cambio podría alejar al público que ya estaba familarizado con el sonido de su primer EP?
Creo que este disco es una buena oportunidad para conectar nuestra música con más personas, es aumentar ese rango de público. Obviamente pensamos en qué dirían nuestros seguidores al escuchar esta nueva ruta que queríamos tomar y lo primero que dijo Sandro fue: “A ti no te pueden decir nada porque eres hijo de El Polen, a mi no me pueden decir nada porque soy moreno, y a Genko no lo puede decir nada porque está loco” jajaj. Decidimos irnos con todo y estuvimos escuchando mucho a Susana Baca, que es una cantante de música afroperuana de una voz hermosa y a Toto la Momposina. Nos interesó muchísimo lo que estaban haciendo bandas como Telebit con su nuevo álbum que tiene arreglos muy colombianos y también lo que venía haciendo Bomba Estéreo nos llamó muchísimo la atención.

Más allá de "Select y Start" y "Gato por liebre" -los dos sencillos previos al disco- me llamó la atención "Brasil", una canción con un ritmo tropical que incita al baile ¿me podrías hablar más de ella?
Brasil es una canción que existe desde que empezó el proyecto, incluso antes de que llegara Geko a la alineación. Cuando empezamos éramos solamente Sandro y yo (batería y guitarra) y a la salida de uno de los ensayos yo estaba caminando por la Avenida Brasil acá en Lima sin un peso en los bolsillos, no tenía ni para el bus, y me fui pensando esta canción para darme ánimos, por eso tiene ese toque festivo. Es una canción un poquito más movida y se parece a lo que estábamos haciendo en Déficit de atención. Estamos muy contentos con ella porque nos ha ayudado a explorar un lado que quisiéramos explorar más en nuestro próximo álbum, esa onda medio santanera.

¿Que representa la idea de los colores en este álbum y por qué son paganos?
Pasa que nosotros vivimos en Lima, una ciudad que tiene cielo gris la mayor parte del año entonces la vida citadina a veces se vuelve estresante, se vuelve monótona, lo puede llevar a uno a la crisis. Este disco es como una salida de todo eso, está más pensado hacia el campo, la música tradicional del Perú y de toda Latinoamérica. Esos colores fueron los que encontramos en el campo, en lo pagano y nos ayudaron a matizar nuestras vidas, encenderlas de nuevo y escapar de la monotonía en la que estábamos atrapados.

¿Hay planes de visitar Colombia para promocionar Colores Paganos en nuestro país?
Aún no te sabría decir cuándo pero claro, es uno de nuestros principales objetivos. Nos sentimos muy identificados con lo que está pasando por allá y tenemos muchos amigos en Colombia, especialmente a los chicos de Telebit con los que nos queremos volver a ver. Después de haber estado allá para nosotros sería un gran placer volver y conectarnos con el público colombiano.

Gracias Rui.

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Para estar pendientes de Tourista y todo lo que va a pasar tras lanzamiento de su nuevo disco, síganlos por aquí.