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Música

Estreno: Pilla "Vámonos con ellos", el catártico primer video de SI$HA

Los ex integrantes de Resina Lalá, renacen este nuevo proyecto crack house para bailar hasta el amanecer.

Se acabó Resina Lalá, pero la vuelta musical continuó. Después de un par de fiestas electrónicas, un encierro en casa de Champeta y un poco de redescubrimiento, los Andreses, Ícaro y Sebastián decidieron reencarnar sus sonidos en un nuevo cuerpo. A ojo cerrado, y como la primera vez, este parche se mandó a experimentar con la música de club, después de topársela «de chepa, y gracias a una ex novia de uno de los integrantes. Fue básicamente una madrina en eso», cuenta Archi. De la farra en clubes y la sensación de que esta vez debían cantarle al olvido, nació SI$HA. El pelaito acabado de nacer lleva el nombre de una droga que se consume en Atenas y que se parece al crocodile y explora un género que ellos definen como crack house; con letras coreables que retratan esas historias, que sólo un parche tan descontrolado como este podría contar. Por ejemplo, hace algunos meses cuando Resina Lalá mandó oficialmente su carta de despedida, nos presentaron “Vámonos con ellos”. Esta canción hace parte de una colección de 9 temas que la banda irá lanzando como sencillos y trata sobre eso que, la verdad, a todos nos chifla: la fiesta después de la fiesta y el amor. Muy punkero, al final. Para empezar el año, SI$HA lanzó el video para esta canción. El clip es una especie de estado alterado que a través de imágenes de archivo que evocan la nostalgia y algunas tomas capturadas por ellos, te van llevando hacia una hermosa laguna situada en las cordilleras andinas que rodean Bogotá.

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Se terminó Resina Lalá y estuvieron ahí encerrados, redescubriéndose y todo lo que cuentas en la carta de Resina. ¿De qué va este nuevo hijo?¿Qué hace SI$HA? El comienzo es como una vuelta de meterse de lleno a redescubrirnos en otro ámbito y saber, a pesar de que somos músicos empíricos, que podíamos producir distinto a lo que habíamos hecho y cómo podíamos tener la capacidad de descubrir otros géneros dentro de nuestra misma empírea. Lo que pasó fue que caímos de chepa en todo este cuento de los clubes y la electrónica de club, y una ex novia de uno de los integrantes fue básicamente una madrina en eso, empezamos a conocer todo este mundo y esta nueva música, que la verdad no habíamos explorado. Musicalmente comenzamos a aprender a partir de ir a la fiesta y ver cómo es la relación con esta música. El escucha de esta música es muy distinto al que escucha rock o al que escucha rap. Es muy introspectivo y muchas veces no tiene voces. Creo que es un esfuerzo que uno tiene que hacer, el consume esta música, porque no tiene esa guía, mal que bien la voz a uno lo ubica a en la canción. «Aquí viene el coro, aquí es el verso. Tin». Y esto es un gran plano de capas de sonido que además es más largo y tiene otra relación con el tiempo y entonces, en la misma fiesta aprendimos, entre comillas, a llegar a hacer esa música. Porque de aprender no hemos aprendido nada, simplemente nos arriesgamos. Su musicalización es electrónica, pero sí están usando letras para sus temas ¿sí? Sí. Nosotros siempre le hemos dado un valor especial a dos cosas aparte de la música y son: la puesta en escena y la parte lírica. Al no ser músicos y no ser muy perfeccionistas en el tema musical, nos valemos de esas dos esferas que complementan. La letra para nosotros es muy importante, además tenemos cosas que contar y sólo con líneas instrumentales jamás podríamos trasmitir esas cosas que tenemos por contar. ¿Cómo tomaron la decisión de que el rock no iba más?¿cómo fue ese momento?

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Fue un cansancio y sentir que ya habíamos crecido en cierta manera. Ya no teníamos esa misma rebeldía, digamos. El punk para nosotros fue un momento muy adolescente y una cosa de descarga y de catarsis, muy violenta. Pero, uno también se mama de eso, no siempre se puede ser el mismo. Nosotros sentimos, colectivamente, que ya éramos otros y además, que la ciudad en la que vivíamos, Bogotá, ya era otra. Asimismo, como que el entorno y nosotros estábamos parados en otro lado y primero, no nos brotaba con facilidad el rock, no lo escuchábamos con facilidad. Seguimos siendo fanáticos de muchas bandas, pero ya no buscábamos dentro del rock o dentro del punk muchas cosas.

¿Cuáles fueron las primeras fiestas electrónicas que los engancharon a apostarle a esta música?

Nosotros íbamos a fiestas electrónicas desde chiquitos. En el centro había una tienda en la Jimenez con 5, El Hueco. Arriba era una cigarrería, abajo un antro oscuro para bailar música electrónica… Fiestas de drum and bass en parqueaderos, en Piso 30! y Bogotraxx. Era el punk de la electrónica ¿A qué tipo de música electrónica le apuesta SI$HA?

Nosotros acotamos nuestro género musical como crack house. El crack house se basa en el house y muchas veces tiene voz encima. Se puede cantar y para nosotros era muy importante que se pudiera cantar porque tenemos cosas por decir, además porque la fiesta coreable, el acto de gritar las cosas, nos llama mucho la atención. Ver a la gente cantar en una fiesta es distinto que verla solo bailar, a pesar de que puede estar muy enrumbada por dentro. Por otro lado, así se llama el género, porque además crack house es el nombre en inglés de estas casa de drogadictos que están vueltas mierda y la gente está vuelta mierda, y hay jeringas y mierdas. Entonces hicimos una relación de eso con el nombre SI$HA, que significa pipa en árabe y una droga terrible en Atenas. Los drogadictos la consiguen armándola en farmacias con gasolina y con mierdas, es como parecida al crocodile. Nos inquietó por el hecho de que esa gente que prueba eso, está en el máximo nivel de olvido. Es decir, tú ya te estás desapareciendo físicamente, porque la droga te carcome la piel, es porque te olvidaste hasta de ti mismo. A esa metáfora del olvido es a la que le cantamos y el olvido de esta gente tirada en las calles desapareciéndose prácticamente, le dio el nombre a SI$HA.

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En esta nueva etapa ya no tienen bajo, guitarra y batería ¿no? ¿Cómo es la nueva formación de ese grupo? ¿Qué hace cada uno en él?

Sí tenemos bajo y tenemos guitarra, pero batería ya no. Somos cuatro. Entonces, tenemos un bajo, en el que está Ícaro López de Mesa, antiguo bajista de Resina Lalá, quien además toca sintetizador de bajo en algunas de las canciones. Tenemos a Andrés Velásquez, anteriormente el baterista, que hoy hace las programaciones, crea los sets y es el vocalista principal, está Andrés Archila, que toca la guitarra en algunas canciones y toca un sintetizador, y Sebastián Sanabria, que era el tecladista de Resina, toca un sintetizador también. Entonces son dos sintetizadores, bajo, programaciones y voces, coros, que hacemos los tres.

¿SI$HA también se da duro en la cabeza? A bueno eso sí nos quedó. Eso nos quedó de la etapa rockera porque de todas maneras dentro del eje conceptual y fundamental de SI$HA, queda un germen de lo que éramos antes y a pesar de que maduramos en ciertas cosas, no hemos madurado en otras. Nos seguimos dando en la cabeza, somos muy nocheros, muy guarichos, y encontramos una cuotica muy especial en salir de fiesta, en amanecer después de la fiesta, en quedar vuelto nada después de las fiestas. Además, como que ahí pasan muchas cosas, uno conoce novias, uno conoce viejas o conoce gente influyente. Pasan muchas cosas, entonces sentimos que tenemos que seguir toteándonos. ¿Qué es lo más bacano que han descubierto en esta nueva etapa de experimentación?

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Saber que realmente podemos hacer música. Creernos el cuento, sentir que no somos más un exploradorcito ahí de la música, sino más bien que la música está ahí, simplemente hay que agarrarla.

¿Podrías contarme un poco del video de "Vámonos con ellos"?

El clip se realizó muy en línea con lo que dice la canción y cómo la canción fue concebida. La canción básicamente habla de una noche después de una gran fiesta, un amanecer con una chica que uno le dice: “Marica, eres la más guapa que he visto en la vida, cógeme la mano y vamos a rematar con estos manes que no sabemos quiénes son" ¿sabes? Es como una situación que se nos ha repetido muchas veces. Terminamos en reuniones, en remates que ni idea, con gente que ni idea y es chévere. Y esa canción sale como de ahí. Entonces, el rodaje responde a esa anécdota y a la conformación de la canción a partir de eso. Salimos y rodamos una parte del video aquí en Chapinero y pues obviamente todo amenizado con los traguitos y otras cositas que nos permitieron seguir derecho y llegar al sol, que era donde teníamos que terminar el rodaje. Digamos que la cogida de los carros, el amanecer, la gente en los carros muy enfiestada respondía conceptualmente a lo que era la canción. En el video hay unos círculos negros con unos símbolos que aparecen de repente. ¿Qué son esos círculos negros?

El video en sí, queríamos que fuera un compendió de imágenes muy nostálgicas porque SI$HA también como que le canta siempre al olvido. Como que después de lo que nos sucedió y todos los cambios que han sucedido dimos con que el olvido era algo a lo que le teníamos que cantar. Entonces, olvidar, olvidarse de todo, olvidarse de uno mismo, olvidar todo el tiempo. El video es un compendio de imágenes muy nostálgicas que evocan eso, pero solamente desde lo estético. O sea, no es como una imagen del olvido como quemar una foto de la novia, no queríamos que fuera así, sino solamente evocar desde lo estético una sensación nostálgica, pura percepción. Sí, hay unas imágenes de archivo que usamos, que bueno ese era el objetivo de todas las imágenes como aquellas peliculitas que todas hablan de olvido, nostalgia. Un cierto romanticismo ahí. Y hay estas figuras de las que tu hablas que son signos que hemos diseñado, que además usamos en escena con una instalación con luces y son una codificación que hemos creado en referencia al olvido (nuestro concepto transversal). ¿Qué significa cada uno?

Eso es algo que no te voy a responder en este momento porque hace parte de algo que se va a ir revelando conforme hagamos próximas entregas y lanzamientos. Por ahora queríamos precisamente esto, generar la pregunta por ellos. Así que gracias por habértelo cuestionado. ¿Qué esperan lograr con SI$HA? La idea es que SI$HA se posicione como un acto en vivo de electrónica bastante influyente, porque nosotros proponemos desde el sonido y desde la puesta en escena como te decía, entonces es una visión holística de lo que debería ser un acto en vivo. Y además pensamos que respondemos, como siempre lo hemos hecho, a la época en la que estamos. Súper actual, que perfectamente lo puede escuchar todo el mundo. ¿Qué buscamos con SI$HA? Volver a triunfar. Volver a comernos al mundo, la dominación global.

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