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Comida

Conoce al legendario productor de Pop Rock que cambió la música por las donas

Mark Trombino, ex baterista y productor de grupos como Blink 182, decidió cambiar la música por lo que más le gusta: las donas.
The GG Almond donut

Puede que al entrar a Donut Friend, una tienda gourmet de donas en el barrio Highland Park de Los Ángeles, te impresionen sus murales como de jardín de niños con onda, su barra de toppings que deja en ridículo a cualquier lugar de helados de yoghurt, y la falta de octagenarios seniles y drogadictos que parecen vivir en el resto de las tiendas de donas de la ciudad. Pero al inspeccionar de cerca el menú, algo hará que se te olvide todo eso, y sea reemplazado por una súbita rememoración de tu yo adolescente. La dona rellena de crema pastelera con glaseado de chocolate aparece en el menú como la Custard Front Drive; la clásica con chispitas, Rites of Sprinkles. Las camisetas de la tienda modifican el logo de Drive Like Jehu para que en vez digan "Drive Like Jelly." Esteee… ¿me acabo de meter a… una tienda de donas emo?

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Donut Friend es el proyecto de ensueño de Mark Trombino, ex-baterista de Drive Like Jehu y productor de todos los discos de pop punk que seguramente escuchaste a finales de los 90 y principios del nuevo milenio: desde Dude Ranch de Blink 182 a Clarity de Jimmy Eat World y EndSerenading de Mineral. Por más de dos décadas, Trombino dejó su marca en una lista interminable de éxitos de indie, pop punk, y post-hardcore, pero hasta ahora pudo cumplir su sueño de años de tener su propia tienda de donas.

Mark Trombino con sus donas. Todas las fotos de Hanian Crowson.

Y parece que lo está haciendo muy bien. El increíblemente creativo menú de Donut Friend incluye creaciones como la Jets to Basil (una dona rellena de queso de cabra, mermelada de fresa y albahaca fresca, con un glaseado de azúcar balsámica hasta arriba) y la GG Almond (con Gruyere y relleno de miel, y con almendras tostadas esparcidas hasta arriba), las cuales comería feliz cualquier día en lugar de cualquier otra dona genérica. Me reuní con Trombino en uno de sus pocos días libres para tratar de entender qué fue lo que lo hizo querer dejar la industria de la música y reemplazarla por harina, freidoras y azúcar glaseada.

MUNCHIES: ¿Por qué donas? Mark Trombino: Mi carrera musical lleva en declive como unos diez años. La música como negocio está cambiando. Tenía que tomar una decisión acerca de tratar de hacer algo nuevo. Y llevaba años con la idea de hacer una tienda de donas así, así que decidí intentarlo, a pesar de que era algo muy lejos de mi zona de confort. No es que ame a las donas más que otra cosa en el mundo, o que tenga una verdadera pasión por las donas. Simplemente tenía una idea en mi cabeza que creí que era tan buena que no quería que alguien más me la ganara. Era la idea de tener una tienda de donas en la que puedes hacer donar por pedido, algo así como los lugares de helados de yoghurt. Y simplemente pensé que podía hacerlo.

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¿Cómo hiciste la transición de producir discos a producir donas? Hice mucha investigación. Esto fue hace unos seis años, cuando empecé a pensar en esto. Visité varias tiendas de donas que estaban apareciendo por entonces, como Voodoo Doughnuts en Portland y Top Pot Doughnuts en Seattle. Me gustaron mucho las de Top Pot. De hecho, mi dona básica está basada ligeramente en su receta. La modifiqué en casa y las hice veganas. A pesar de que no soy vegano, todos mis amigos sí lo son. No quería ser una tienda de donas de punk rock, y no quería ser una tienda de donas veganas. Lo único que quería era que todo el mundo pudiera disfrutar lo que hiciera.

Photo by Hanian Crowson

La Bacon-182, una dona de maple glaseada con tocino encima.

¿Sientes que tu experiencia como productor musical tiene alguna influencia en tu proceso creativo? Sí. Aunque no sé si eso es una ventaja; no lo veo de ese modo. Es muy diferente, y eso está bien y mal al mismo tiempo. Cuando hacía discos, yo hacía todo. Yo era el ingeniero, productor, tocaba la batería, editaba, todo. En Donut Friend no puedo hacer eso. Se trata de dejarlo ir, delegar, y confiar en otras personas. Pero en cuanto al proceso creativo, siento que esto es personalmente mucho más creativo que hacer discos. Cuando hacía discos, tomaba la música de otras personas y les daba vida. Con esto, siento que es algo que yo me inventé y a lo que le estoy dando vida.

¿Cómo se te ocurrió la idea de hacer donas con una temática de bandas? Estaba con un amigo en un bar, y estábamos jugando a inventarnos nombres de donas chistosos. Eran súper estúpidos, y sólo pensaba, nunca voy a poder hacer esto. Pero de la nada empecé a pensar más, y había algunos que creí que sí funcionarían. Como Rites of Sprinkles, obviamente es una dona con chispitas. La gente lo puede leer y pensar dona con chispas. Y no creo que nadie que conozca a la banda lo pensaría dos veces. O bueno, a lo mejor sí.

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Mark-Fryer

¿Sientes que quieres reinventar la dona en un nivel conceptual? Mi único motivo era el de abrir una tienda de donas con esta idea que se me ocurrió. No se trata tanto sobre las donas, sino acerca de todo el concepto —la creatividad y la música. Se trata acerca de más cosas que simplemente llevar más allá los límites de una dona, o lo que sea; siento que eso ya lo hice con el concepto. Cuando empieza a parecer comida de feria de pueblo, entonces ya es llevarlo muy lejos. He pensado en hacer más cosas saladas, y rellenarlas con más opciones saladas. Algo para que sea como una comida completa, como una pizza-dona.

¿Alguna de las bandas ha probado las donas que llevan su nombre? Sí. Solía haber una dona llamada The Jelly Sound, y Blair de The Jealous Sound vino un par de veces y la pidió, y uno de los tipos de Wall of Voodoo vino y probó la Walnut Voodoo. Jets to Basil es una de mis favoritas. También es una de las que menos parecen una dona, que es algo que me gusta, y una de las más populares. Esa y la Bacon-182 (una dona glaseada de maple con tocino arriba), por mucho.

¿Llegará un momento en que conceptualices donas para artistas de distintos géneros, como, no sé, Skrillex o Miley Cyrus? Eso estaría difícil, incluso como un chiste. Si simplemente hiciera una dona horrible… eso podría estar chistoso.

¿Sigues haciendo algo de producción musical? Lo único que puedo hacer en estos momentos es operar la tienda. Me advirtieron lo difícil que es abrir un restaurante, pero es verdad. Mi visión era hacer esto por un rato y luego llegar a un punto en el que la carga de trabajo bajara y pudiera regresar a hacer discos. Siempre fue la intención, y no quiero para. Pero por ahora, este es un trabajo de 24 horas al día.

¿Qué opinas de los discos que hiciste en el pasado? Estoy orgulloso de la mayoría de ellos. Me imagino que le pasa lo mismo a cualquier persona que haga discos, pero no puedo escuchar mis discos de manera objetiva. Pero el que probablemente me divertí más haciendo fue el Bleed American de Jimmy Eat World, porque ahí sólo éramos la banda y yo, sin ninguna disquera o manager de por medio. La experiencia más pura de hacer un disco que he tenido.

¿Qué artistas contemporáneos estás escuchando actualmente? Cada vez me desconecto más de la música actual, lo cual está mal, pero pasa. Las modas son tan cícllicas que siempre regresan. Siempre me ha gustado la música que trata de estar en la vaguardia. Una de mis bandas favoritas ahorita es YACHT. Y es rarísimo, porque es música bailable súper pop, algo que normalmente no sería algo que me gustaría. El otro día vinieron a mi tienda y les faneé duro.

Gracias por platicar con nosotros, Mark.